Tecnología España , León, Martes, 12 de diciembre de 2006 a las 17:40

Bioges Starters investiga la utilización de enzimas en la fabricación de queso de búfalo y la producción de zumos

Esta empresa, asentada en León y especializada en biotecnología, apuesta por la transferencia de resultados desde la Universidad a la iniciativa privada

MJF/DICYT  La empresa Bioges Starters se ha convertido en un ejemplo de transferencia de tecnología desde el ámbito universitario a la iniciativa privada desde le momento de su creación hace dos años como spin off de la Universidad de León, con el objetivo de potenciar líneas de investigación que permitan la explotación comercial de los resultados científicos obtenidos. Una de ellas es un proyecto desarrollado en la actualidad por la empresa, asentada en la capital leonesa y especializada en el ámbito de la biotecnología, que se dirige a la producción de quimosina y pectinasas para facilitar la aplicación de las primeras en la fabricación de queso de búfalo y de las segundas en la clarificación de zumos.

 

Esta investigación, que cuenta con una subvención de la Agencia de Inversiones y Servicios (ADE), se divide dos partes; una centrada en la producción de microorganismos generadores de quimosina, una enzima que tiene la propiedad de cuajar la leche en el proceso de elaboración del queso. El proceso desarrollado por Bioges Starters permite obtener quimosina en grandes cantidades y por lo tanto su aplicación industrial.

La segunda parte de este proyecto está encaminada a la producción de pectinasas, un tipo de enzima capaz de hidrolizar los polisacáridos que normalmente se encuentran en los zumos, también se centra en la producción de estas enzimas a través de diversos microorganismos, con la ventaja de que “la que producimos nosotros tiene categoría Gras (Generally Recognize As Safe)”, según explica uno de los socios fundadores de la empresa y catedrático de Microbiología, Germán Naharro.

Otro de los proyectos que realiza Bioges Starters es la producción de acaricidas destinados a eliminar los ácaros del jamón. En este caso la parte innovadora del proyecto es, según señala Germán Naharro, “el uso de productos naturales en lugar de productos de carácter químico”.

Además, la empresa también desarrolla una línea de investigación dirigida a la producción de bacteriocinas, reconocidos también con categoría Gras, muy útiles a la hora de inhibir el crecimiento de otras bacterias. Naharro explica que las bacterias del ácido láctico producen una gran cantidad de bacteriocinas y el objetivo es purificarlas para que puedan ser utilizadas en productos embutidos o carnes envasadas, a los que se puede añadir para contribuir a la conservación de este tipo de derivados cárnicos perecederos.

La empresa también se ha adentrado en la producción de vacunas vivas atenuadas para usarlas en el tratamiento de distintas enfermedades, como la disentería porcina o las salmoneras, en las que se utilizan estas vacunas fabricadas como vehículo para crear defensas contra otras enfermedades.

 

Este abanico de líneas de investigación se han puesto en marcha en los dos años de existencia de la empresa, que ha experimentado un crecimiento gradual durante este periodo y que ya cuenta con seis empleados permanentes que trabajan en las instalaciones del Instituto de Recursos Naturales de la Universidad de León, donde tiene su sede esta empresa. El socio fundador de Bioges señala que emprender una iniciativa de este tipo “requiere una inversión constante” porque el ámbito concreto de la biotecnología “no producirá beneficios hasta dentro de unos años, al menos hasta el 2010 o 2012”.