Tecnología México , México, Mi茅rcoles, 06 de febrero de 2013 a las 15:57

Buscan desarrollar aut贸matas con movimientos de alta precisi贸n

El proyecto form贸 parte de una red de investigaci贸n en la que participan la Universidad Freie Universitat Berlin, la Complutense de Madrid, la Universidad de Guadalajara y el CIC del Instituto Polit茅cnico Nacional

Agencia ID/DICYT En el Centro de Investigación en Cómputo (CIC) del IPN, el doctor Juan Humberto Sossa Azuela y su grupo de trabajo desarrollaron un conjunto de algoritmos para el análisis de imágenes y el reconocimiento de patrones que permiten a una máquina (un robot autónomo) resolver una tarea asignada, por ejemplo, localizar un objeto, llevarlo a un lugar asignado, avanzar hacia él y tomarlo.


El proyecto formó parte de una red de investigación cuyo objetivo principal es el diseño de robots autónomos. En esta red participaron, de manera conjunta, dos universidades europeas, la Freie Universitat Berlin, de Alemania, la Complutense de Madrid, España, y por parte de México la Universidad de Guadalajara, y el CIC del Instituto Politécnico Nacional.


El doctor Sossa Azuela, coordinador del proyecto de investigación, explicó que una máquina-prototipo a partir de sensores de visión, audición, olfato y micrófonos, puede percibir con bastante precisión el medio ambiente que la rodea, tal y como lo hace una persona. “Con estas herramientas y un programa apropiado que procese la información, el robot podrá tomar decisiones adecuadas; avanzar, detenerse, saltar, subir, bajar, volar o dar vueltas, y lo hará de manera autónoma con la mínima asistencia humana”, detalló el especialista del CIC.


Este proyecto de investigación, apoyado por el Fondo de Cooperación Internacional en Ciencia y Tecnología (FONCICYT) de la Unión Europea-México, tuvo el reto de construir robots de servicio sobre ruedas que, a partir del uso de imágenes obtenidas por medio de cámaras colocadas en el aparato, son capaces de detectar obstáculos, por ejemplo, autos o peatones.


Con el apoyo de este fondo se “sembró” una semilla de investigación colaborativa, a través de la cual se logró publicar un buen número de trabajos en revistas y congresos, y graduar estudiantes. Por parte de México, la Universidad de Guadalajara obtuvo la patente de un prototipo de robot humanoide.


En España diseñaron varios robots para el área de la agricultura; mientras que en Alemania lograron poner en operación un prototipo muy eficiente de automóvil autónomo, capaz de navegar en calles.


El especialista recalcó que del análisis de imágenes de la información percibida por una cámara colocada en un robot, se obtiene información útil que permite a la máquina identificar los objetos a su alrededor (árboles, piedras, caminos, etcétera), con el fin de evadirlos, tomarlos o realizar con ellos diversas tareas.


“El conjunto de algoritmos le dice a la máquina qué elementos se encuentran en su camino; entonces, si va a realizar una acción, como mover las patas o ruedas hasta un árbol, lo hará de manera muy precisa”, comentó el doctor Sossa.


Aunque en México no se fabrican robots, en cantidades comparables a las de otros países, se adquieren en el mercado con el fin de utilizarlos como plataformas para probar nuevos algoritmos, para que realicen tareas designadas: andar, volar, tomar objetos, etcétera; “no llegamos al punto de producir tecnología propia, nos encontramos en la transición”.


Respecto a la industria de los robots comentó que ha crecido, en especial los que están enfocados al servicio de la persona; y se estima que para el 2025 se van a invertir 70 mil millones de dólares con crecimiento exponencial sobre todo en Japón.


Luego de esta colaboración, en el IPN se creó una Red Institucional de Expertos en Robótica y Mecatrónica con el fin de coordinar trabajos individuales y así pasar de la escritura de artículos y realización de tesis al registro de patentes y el desarrollo de productos tecnológicos.