Alimentación España , Tarragona, Viernes, 12 de junio de 2015 a las 14:56

Demuestran que es posible rehabilitar y resocializar chimpancés utilizados en espectáculos y como mascotas

Es la primera vez que se evalúa y se monitoriza este proceso, y lo han realizado conjuntamente la Fundación MONA, el IPHES y la Universidad de Gerona

IPHES/DICYT  Desde hace décadas – y aún en la actualidad – los primates son utilizados en el mundo del entretenimiento, circo, publicidad, televisión o como mascotas. En la mayoría de ocasiones este hecho implica la separación de la madre, un aislamiento social, humanización o incluso entrenamiento forzado. Este hecho plantea diversas preguntas: ¿Cuáles son las consecuencias de que nos separen de individuos de nuestra especie? ¿Qué impacto tiene una extrema humanización en primates no humanos? Y finalmente ¿es posible rehabilitar a estos animales del daño ocasionado por los humanos?


Esta cautividad prolongada aislados de individuos de la misma especie comporta toda una serie de consecuencias tanto a nivel físico (fracturas óseas, déficit psicomotor, malnutrición, problemas de desarrollo, heridas) como psicológico (conductas anormales, hiperagresión, fobia social, miedo, apatía, agorafobia). Recientemente, se ha documentado incluso la posibilidad de que chimpancés con historias previas de aislamiento y maltrato desarrollen trastornos psicopatológicos homólogos a los de los seres humanos, fundamentalmente trastorno por estrés post-traumático y depresión mayor.


Una vez rescatados, muchos de estos individuos son realojados en Centros de Recuperación y Santuarios. El objetivo de estos centros es asegurar el bienestar y la calidad de vida de muchos chimpancés que han sido extremadamente humanizados. La tarea no es en absoluto fácil. La recuperación de estos individuos pasa por disponer de tiempo y dinero. El coste de la rehabilitación de un chimpancé puede ascender a más de 7.000 euros anuales. El tiempo de rehabilitar a un chimpancé puede oscilar entre los 5 y 10 años.


Investigadores de la Fundació Mona, IPHES (Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social) y la Universitat de Girona, han evaluado y monitorizado por primera vez el proceso de rehabilitación y socialización de chimpancés que fueron utilizados en el mundo del espectáculo o usados como mascotas. Durante un período de 8 años se realizó un seguimiento de un grupo de 15 chimpancés. Los investigadores evaluaron la evolución del bienestar de estos individuos.


Tal como comenta el Dr. Miquel Llorente – investigador de la Fundació Mona y del IPHES, y coordinador principal de la investigación – “el proyecto resulta pionero por dos aspectos fundamentales. En primer lugar, porque es la primera ocasión en la que de manera objetiva y científica podemos afirmar que chimpancés que fueron actores o mascotas y que son trasladados a Santuarios acreditados y de prestigio pueden volver a desarrollar una vida lo más similar posible a la de sus conespecíficos salvajes. Si bien existían evidencias sobre esas posibilidades en chimpancés de laboratorio, nunca se había podido determinar este hecho con otros chimpancés. En segundo lugar, es realmente difícil encontrar en la literatura científica trabajos de seguimiento similares, de 8 años de duración. La cantidad de trabajo y datos generados ha sido inmenso, pero las conclusiones también son mucho más sólidas”.


Los resultados del estudio - publicados en el International Journal of Primatology - mostraron que los comportamientos típicos de especie, las conductas positivas así como los índices de bienestar utilizados, se incrementaban a lo largo del tiempo. Esta evolución positiva fue similar tanto para los chimpancés utilizados como mascotas como para los que habían tenido una vida dedicada al espectáculo. Sin embargo, los individuos nacidos en cautividad evolucionaban mejor que los nacidos en libertad.


Esto puede deberse, en palabras de Olga Feliu –coautora del estudio y Directora de la Fundación Mona- al hecho de que “los chimpancés nacidos en libertad, y que además han perdido a la madre, han sufrido una situación más traumática durante la infancia y por tanto son más susceptibles a situaciones de estrés”. Aquellos individuos que llegaron al centro siendo más jóvenes también adquirieron un nivel de rehabilitación más elevado y más rápido que aquellos otros que habían sido rescatados en una edad adulta.


“Con nuestros resultados podemos concluir –prosigue el Dr. Llorente– que la nueva vida de estos individuos en grupos sociales donde pueden desarrollar nuevas habilidades sociales, unas instalaciones amplias, naturalizadas y complejas, así como una correcta estimulación cognitiva y emocional tiene un impacto positivo en la recuperación de las gravísimas consecuencias del aislamiento social y el maltrato en estas especies tan cercanas a nosotros”.

 

“Sin embargo –apunta Olga Feliu– aunque hemos encontrado una fuerte evidencia de que es posible rehabilitar a estos animales, estos datos no deben ser utilizados en ningún caso para justificar el uso de estos primates para el mundo del espectáculo o como mascotas”. El coste de la rehabilitación y socialización de estos chimpancés durante el período de estudio ha ascendido a un total de 667.000 euros.