Salud España , Salamanca, Viernes, 15 de octubre de 2004 a las 14:12

El Centro de Alzheimer basará su labor investigadora en las terapias psicosociales

Los estudios se desarrollarán en colaboración con la Universidad de Salamanca

Ana Victoria Pérez/DICYT El futuro Centro de Alzheimer de Salamanca, cuya creación fue anunciada hace un mes el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, basará su labor investigadora en el desarrollo de terapias psicosociales y en la aplicación de nuevas tecnologías a la mejorar de la calidad de vida de estos enfermos y sus cuidadores. El proyecto contará con una financiación inicial de 12 millones de euros, y la alta especialización de las labores que se desarrollarán en sus instalaciones hará necesario contratar cerca de 180 trabajadores entre personal técnico y de atención directa a los enfermos. Sin embargo, a estas plazas no se sumarán, por el momento, las de investigadores profesionales, ya que, según han confirmado fuentes del ministerio a DICYT, "se ha previsto establecer acuerdos con diferentes equipos de investigación de la Universidad de Salamanca para desarrollar los estudios en las diferentes líneas de trabajo propuestas".

El proyecto del Centro Nacional de Referencia para la Enfermedad de Alzheimer contempla una segunda vía de investigación además de la psicosocial, destinada a diseñar estándares para evaluar la calidad de los servicios que reciben las personas afectadas por este tipo de demencia y sus familiares. Entre las iniciativas más destacadas en este ámbito de estudio se encuentra el diseño de un instrumento que recoja los diferentes parámetros que caracterizan cada una de las tres fases de la enfermedad, con el objetivo de poder evaluar de manera precisa la evolución de los enfermos.

La creación de este centro fomentará la participación de equipos de investigación salmantinos en redes internacionales de investigación de la enfermedad de alzheimer, que actualmente están desarrollando iniciativas terapéuticas experimentales. Se pretende con ello incrementar la transferencia de conocimientos entre los diferentes grupos de investigación que han surgido en torno al estudio de esta demencia.

Pendiente aún de conocer su ubicación definitiva, el Centro de Alzheimer de Salamanca contará con capacidad para albergar a 120 personas. Estará organizado modularmente en lo que se denominan unidades de convivencia, y en cada una de ellas se ubicarán entre 10 y 12 enfermos. Esta organización es, según el Imserso, la más adecuada para desarrollar tanto los ejercicios de rehabilitación psicosocial como los destinados a mantener la orientación espaciotemporal de los enfermos, sus habilidades comunicativas básicas y la prevención de situaciones de estrés.

Centros de día

En la líneas propuesta por el ministerio se desarrollan los trabajos del grupo de investigación de la Facultad de Psicología de la Universidad de Salamanca que dirige el decano del centro, José Luis Vega. Según ha adelantado el profesor Vega a DICYT, "en estos momentos la mayor parte de los tratamientos para enfermos de alzheimer combinan la medicación con las terapias psicosociales. Se trata de mantener activo al enfermo en los aspectos cognitivo, motriz y funcional a través de una serie de ejercicios muy simples". Este tipo de terapias se llevan a cabo principalmente en los centros de día, como el Centro Terapéutico Boni Mediero, que la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer tiene en Salamanca.

En este centro es precisamente, en el que el equipo del profesor Vega ensaya una nueva terapia para enfermos de Alzheimer basada en la lectura, conocida como Método Lecto, y en la que desempeñan un papel fundamental las nuevas tecnologías.


 

Leer para no olvidar

En el diseño del Método Lecto, (ver información), tal y como ha denominado a su terapia el grupo de investigación del profesor Vega, han contribuido especialistas en envejecimiento como los profesores Belén Bueno, José Buz, o el propio decano de la Facultad de Psicología, y expertos en los procesos de lectura como la profesora Mercedes Rueda. El decano de Psicología apunta que "estamos utilizando las nuevas tecnologías, en concreto el CD-rom, como una herramienta terapéutica a través de la que estimulamos diferentes procesos cognitivos, todos ellos relacionados con la lectura, en personas afectadas por el alzheimer, y que aún se encuentra en una etapa primaria de la enfermedad".
Estos enfermos reciben entre tres y cinco sesiones de terapia semanales durante las que ejercitan cinco tareas básicas que están implicadas en la lectura, tales como la construcción de palabras usando sílabas, asociación de palabras con imágenes, o la clasificación de los elementos a los que dichas palabras hacen referencia en una categoría concreta.


La lectura es una de las capacidades que más tiempo conserva un enfermo de alzheimer. Por este motivo el equipo del profesor Vega ha centrado en ella el diseño de su terapia neuropsicológica, y aunque el deterioro de la memoria es el síntoma más reconocible en las personas con alzheimer, la pérdida de léxico es más preocupante, ya que dificulta la comunicación de estas personas, afectando a su comportamiento y propiciando que estén cada vez más aisladas.