Alimentación España , La Rioja, Viernes, 16 de diciembre de 2011 a las 17:03

Grosellas, frambuesas o arándanos: cultivos medicinales y alternativa económica en La Rioja

La Reserva de la Biosfera Valles del Leza, Jubera, Cidacos, Alhama ha realizado un proyecto con estos frutos, ricos en antioxidantes

RAG/DICYT La alta capacidad de adaptación de las plantas medicinales en la Reserva de la Biosfera Valles del Leza, Jubera, Cidacos, así como la buena demanda en el mercado de alguna de ellas, como los arándanos, son dos de los motivos que auspiciaron la creación de un proyecto para su cultivo que, a su vez, pretende erigirse como una alternativa económica para esta zona de La Rioja. Con este proyecto, los ayuntamientos de los pueblos interesados ceden terrenos a los responsables de la reserva y estos los habilitan para acoger estos cultivos. A cambio, los municipios se comprometen a facilitar información, entre otras cosas, de la producción y las variedades con un mayor potencial.

 

El cultivo de plantas medicinales puede constituirse como una buena herramienta para potenciar el desarrollo rural y fijar población, lo que evitaría la despoblación. Además, son varios los beneficios ambientales que reporta su utilización. "Supone una protección del medio natural y la biodiversidad, una defensa contra la erosión, el aprovechamiento de tierras marginales o yermas, la posibilidad de desarrollo de la apicultura" e incluso "el desarrollo de la agricultura ecológica", han detallado a DiCYT desde la Reserva de la Biosfera.

 

La abundancia de especies de plantas aromáticas y medicinales y frutos silvestres encontrados de forma natural en la Reserva de la Biosfera hicieron pensar a la hora de promover el proyecto que su cultivo puede tener un futuro prometedor en la zona, así como hacer viable la instalación de parcelas piloto para su explotación.

 

Hasta el momento, se han realizado tres cultivos con grosellas, frambuesas, moras y arándanos, productos alternativos a los que tradicionalmente se ha explotado en la zona, como son los castaños y los olivos. Las primeras plantaciones se realizaron en primavera, sin embargo, la mayoría tuvieron lugar en octubre, ha explicado Estela Carnero, responsable del proyecto.

 

Por lo general, la respuesta que durante estos meses han tenido los primeros frutos del bosque plantados ha sido positiva. Se considera "espectaculares" los resultados obtenidos con las variedades de arándano Himbo-top y Sugana, y también han sido buenos con las Elliot y Chandler, así como con las moras de variedad Navaho y la grosella roja Junifer.

 

Valor de estos productos

 

Aunque se pueden destinar para la industria agroalimentaria y, en concreto, para procesos como la elaboración de mermeladas o de licores, la pretensión de los proyectantes es vender estos productos frescos, pues es "mucho más rentable" al contar con mayor demanda en el mercado, sobre todo en lo que se refiere al arándano, ha incidido Carnero, quien ha apuntado que ya hay varios clientes interesados en los productos de la reserva riojana.

 

Si bien se cultiva desde hace siglos, en los últimos años el arándano ha cobrado una mayor importancia en el mercado internacional, entre otras cosas porque sus "excelentes" propiedades han hecho que se interese por él una población que cada vez tiene una "mayor conciencia" por la salud. Canadá y Estados Unidos son los principales consumidores del mundo (y entre ambos también abarcan el 90 por ciento de la producción mundial), pero también es elevado en los países del norte de Europa, han destacado desde la Reserva.

 

Dado el desequilibrio mundial entre la oferta y la demanda, los agricultores tienen asegurada su venta en cualquier momento del año, algo que avalaría la utilidad del proyecto de La Rioja. En España, el cultivo se ha orientado a la producción temprana de esta fruta y se logran las cosechas de más calidad entre abril y mayo, centrada sobre todo en Huelva, han afirmado.

 

Datos de la Reserva

 

El Consejo Internacional del Programa Hombre y Biosfera (MaB) de la UNESCO declaró los Valles del Leza, Jubera, Cidacos y Alhama Reserva de la Biosfera, el 9 de julio de 2003. Se ubica en el límite sur oriental de La Rioja y ocupa casi un 24 por ciento del territorio de esta región regional, con 119.669 hectáreas. Acoge 40 municipios.

 

El territorio que integra la Reserva de la Biosfera se encuentra en una zona de montaña ibérica mediterránea en la que las cumbres raramente superan los 1.600 metros de altitud. Entre su vegetación se encuentran bosques de hayedos, encinares, robledales y gran variedad de matorrales aromáticos. Otros recursos de especial relevancia en la zona son las minas de piritas, según datos de la Reserva.