Salud España , Salamanca, Viernes, 10 de junio de 2005 a las 17:36

Investigadores salamantinos validarán un método pionero para el diagnóstico del autismo y otros trastornos de conducta

El grupo que coordina Ricardo Canal impartirá un curso extraordinario la próxima semana para instruir a profesionales médicos en la detección de este tipo de alteraciones

Ana Victoria Pérez/DICYT El grupo de investigación que coordina Ricardo Canal, de la Facultad de Educación de la Universidad de Salamanca, junto con los doctores del Hospital Clínico Francisco Rey y José Santos, será el encargado de validar a nivel nacional un método de diagnóstico con el que, a través de un cuestionario de 23 preguntas, se intenta determinar si las alteraciones de conducta que presentan niños de entre 23 y 24 meses están producidas por un trastorno autista. Dicha validación se hará en el transcurso del curso extraordinario de la Universidad de Salamanca Detección y Diagnóstico de Trastornos del Espectro Autista, que tendrá lugar del 16 al 18 de este mes. Según ha confirmado el propio Ricardo Canal a DICYT "contar con un método de diagnóstico orientativo para los profesionales de la salud es indispensable, ya el tiempo medio que una familia debe esperar hasta que su hijo es diagnosticado varía entre los 11 y los 33 meses.

El grupo de investigación salmantino que está integrado en el Grupo de Estudios del Espectro Autista del Instituto de Salud Carlos III y los profesionales que lo forman estiman que el tiempo que tardarán en realizar una validación adecuada del test M-CHAT será de seis meses. El profesor Canal comenta  al respecto que "el test elaborado por expertos internacionales ya ha sido validado en Hong Kong en una muestra de 100 niños, obteniéndose una especificidad de más del 90%. Teniendo en cuenta la densidad de población española, aquí los aplicaremos a unos 30 ó 40 niños con autismo, el resto hasta completar los 60 será realizado a niños sanos y a niños afectados por otros trastornos".

"Creemos que la detección precoz de estas alteraciones tendrá efectos positivos tanto en los niños afectados como en sus familias", añade Canal. Un creencia que comparte Manuel Mena, padre de un niño autista y presidente de la asociación Ariadna que, desde 1992, presta servicios educativos y asistenciales a niños con trastornos del espectro autista y a sus familias. "En la actualidad la asociación cuenta con un centro educativo concertado denominado La Cañada en el que actualmente tenemos 17 niños. La mayor parte de ellos han tuvieron que peregrinar de centro médico en centro médico y de especialista en especialista hasta que identificaron cuál era el problema. Por eso valoramos mucho la iniciativa y la implicación de este grupo de investigadores salmantinos", explica Manuel Mena.

Formar especialistas

José Santos Borbujo, jefe de la Unidad de Neurología Pediátrica del Hospital Clínico de Salamanca, considera indispensable que se habiliten los cauces necesarios para formar a los profesionales sanitarios que trabajan en contacto con niños en la identificación de este trastorno. "Existen patologías que un médico únicamente estudia de forma teórica durante sus años de formación. Esto ocurre con el estudio de los trastornos autistas".

Con ánimo de subsanar esta carencia, los investigadores salmantinos han previsto un curso en el que del 16 al 18 de junio médicos de familia, psiquiatras, psicólogos y pedagogos serán instruidos en aspectos como la Neurobiología, la Epidemiología o la Etiología de estas alteraciones facilitándoles la detección de las mismas en su trabajo diario. "Se trata de que la información facilitada por los padres y las alteraciones de conducta que identifica un especialista en su consulta deriven en un diagnóstico adecuado", comenta el doctor Santos. 

Este curso extraordinario que se desarrollará en la Hospedería Fonseca, cuenta con el apoyo de la Consejería de de Sanidad de la Junta de Castilla y León, del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, a´sí como del Instituto de Integración a la Comunidad de la Universidad de Salamanca (INICO), el Instituto de Salud Carlos III y la Federación Autismo de Castilla y León.

Cada vez más casos

Los especialistas responsables del curso han coincidido en señalar que la atención que reciben en España las personas autistas puede calificarse "de mala a regular", y que la mayor parte de las soluciones y recursos que hoy en día existen han partido del propio sistema asociativo.


Según los datos que manejan los especialistas estas instituciones, tendrán aun mayor relevancia en el futuro, ya que si la incidencia estimada a nivel mundial hace unos años era de 4 a 5 casos por cada 10.000 habitantes, ahora se están identificando un caso por cada 1.000 habitantes. Ricardo Canal comenta que "en nuestro ámbito de acción, que comprende las provincias de Salamanca y Zamora, recibimos de uno a dos casos nuevos cada semana, aunque hay que puntualizar que buena parte de las consultas proceden de otras regiones españolas. Realmente no sabemos si existen causas que fomenten el incremento del número de casos diagnosticados o si lo que está ocurriendo es que la gente tiene menos miedo a la hora de admitir ante el especialista que su hijo padece este trastorno".