Alimentación España , Valencia, Viernes, 20 de diciembre de 2013 a las 14:42

La calidad de las aguas de la costa de Gandia

Un estudio recomienda que los planes de gestión ambiental del puerto de Gandia incluyan el monitoreo regular de la calidad en las aguas adyacentes

UPV/DICYT Un equipo de científicos del Instituto de Investigación para la Gestión Integrada de Zonas Costeras (IGIC) de la Universitat Politècnica de València ha analizado la concentración de nutrientes y fitoplancton de las aguas costeras de Gandia.

En este trabajo, los investigadores analizaron la variabilidad espacial del sistema –“estudiando zonas con distintos aportes de agua dulce y nutrientes”- en tres lugares específicos de la costa de Gandia: las zonas de Venecia, Ahuir y un punto a 1.900 metros de la costa donde vierte un emisario submarino de aguas residuales. En cada una de esas zonas, llevaron a cabo diferentes muestreos para la recogida de muestras de agua y su posterior análisis para determinar distintos parámetros físico-químicos y la composición y abundancia del fitoplancton.

Según las primeras conclusiones, la calidad de las aguas es “buena”, si bien proponen medidas puntuales en las zonas más cerradas como el entorno de Venecia para controlar el aporte de nutrientes y garantizar su conservación. En esta zona, los investigadores detectaron la presencia de especies potencialmente formadoras de floraciones algales como dinoflagelados y diatomeas responsables de la secreción de distintas toxinas.

Asimismo, en su estudio señalan que la ampliación del Puerto de Gandia podría aumentar la vulnerabilidad del sistema y favorecer el desarrollo de las floraciones de esas especies tóxicas. Por este motivo los investigadores recomiendan que los planes de gestión ambiental del puerto incluyan el monitoreo regular de la calidad en las aguas adyacentes. Las conclusiones del trabajo fueron publicadas en la revista Environmental Management.

“En el Ahuir y en las zonas de vertido de aguas residuales tratadas los efectos de las entradas de nutrientes se redujeron gracias a un mayor intercambio de agua con las aguas del Mediterráneo”, apunta Maite Sebastiá, investigadora del IGIC del campus de Gandia de la UPV.

Asimismo, en el trabajo se remarca la necesidad de no pasar por alto los “problemas de ámbito local” en los programas de monitoreo de la calidad de las aguas como el programa de la Directiva Marco del Agua.