Ciencia España , León, Miércoles, 29 de septiembre de 2004 a las 22:06

La clínica veterinaria de la Universidad de León trabaja para convertirse en hospital

El cambio permitiría a la facultad obtener la homologación de la carrera a nivel europeo

Juan Tomás Fernández/DICYT Con el comienzo del curso académico, la clínica de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de León ha abierto de nuevo sus puertas a las consultas externas. Su área quirúrgica está equipada desde hace cinco años con los servicios tanto de tomografía (TAC) como de resonancia magnética, lo que la colocan a la vanguardia en España en la disponibilidad de estas dos avanzadas técnicas de diagnóstico. El siguiente reto que se plantea es su transformación en corto plazo en hospital veterinario, lo que permitirá la homologación europea del centro.

 

A este respecto, los evaluadores externos de la Facultad de Veterinaria ha señalado repetidamente la necesidad de la puesta en marcha de un hospital veterinario adjunto alcentro, para así poder obtener la homologación a nivel europeo de la titulación, y este el principal reto que tiene pendiente la facultad. Para paliar esta deficiencia se ha optado por la creación de una fundación que gestione el funcionamiento del hospital. Al tratarse de un centro público, y por tanto sin ánimo de lucro, esta es la única solución. Sin embargo, la puesta en marcha de un centro que necesita un equipamiento y unas instalaciones con mantenimiento especializado, así como su funcionamiento continuo las 24 horas del día plantean interrogantes acerca de la conversión definitiva de la clínica en hospital veterinario.

 

La dotación del área de cirugía se complementa con un sistema de radiología intervencionista con salas de rayos X, además de varios arcos de radioscopia de laboratorio y un microscopio quirúrgico para operaciones. Según ha manifestado a DICYT Alicia Esther Serantes, profesora titular de Medicina Animal que desarrolla parte de su actividad docente e investigadora en el centro, este se ha convertido en un punto de referencia tanto a nivel nacional como europeo al que se envían animales para su tratamiento. Asimismo, son contínuas las visitas y estancias de profesores de toda Europa que vienen a completar su formación teórica y práctica. También es cada vez mayor el número de licenciados que llegan para realizar el periodo de prácticas que les exigen en sus países de origen para poder ejercer la profesión, como es el caso de Portugal.

 

El personal del área quirúrgica de la Clínica Veterinaria está formado por un Catedrático de Universidad, que es además el director del Servicio de Cirugía y Diagnóstico por Imagen, cuatro profesores titulares de universidad y un número variable de becarios. A este equipo hay que añadir el personal externo entre el que se incluyen veterinarios que quieren completar su formación práctica, así como médicos que, a través de convenios firmados con el Hospital de León, pueden formarse en el uso de las avanzadas técnicas de diagnóstico disponibles.

 

Tras la contínua disminución de la actividad ganadera en la provincia de León, la actividad diaria de la clínica se centra en los animales domésticos, sobre todo perros y gatos, y todo tipo de animales salvajes que llegan a la clínica a través de los servicios territoriales de Medio Ambiente y los centros oficiales de recuperación, o bien a través de particulares que los entregan después de haberlos encontrado heridos o enfermos. La recepción de animales que no se han podido tratar en otros centros también constituye una parte del total de pacientes que se tratan en esta clínica. Las causas más comunes de tratamiento difieren según la procedencia del animal. Así, la mayoría de los animales domésticos que llegan a la clínica lo hacen por traumatismos, atropellos, obstrucciones intestinales y, para castraciones. Sin embargo los animales silvestres tratados presentan cuadros clínicos, además de los que son producto de atropellos, los derivados de impactos de bala, golpes con los cables del tendido eléctrico, o infecciones generalizadas. Se da la circunstancia de que prácticamente no llegan animales enfermos por intoxicaciones con venenos. Según explica a DICYT Alicia Serantes esto es el resultado del comportamiento de los animales silvestres enfermos que los lleva, si pueden, a esconderse, mientras que los que no pueden hacerlo son presa fácil para los depredadores.

 

Visitantes 'ilustres'
Aunque la mayor parte de su actividad se concentra en pequeños animales domésticos, la clínica veterinaria recibe con cierta regularidad otro tipo de animales que o bien por sus dimensiones o bien por su excepcionalidad, especies emblemáticas, en peligro de extinción o exóticas, despiertan gran interés entre los medios de comunicación. Los más recientes han sido un águila culebrera que llegó en situación crítica y que ya se ha recuperado, un águila calzada y una garza real. A finales de julio se trató a una tortuga boba, y en años anteriores la Facultad de Veterinaria ha recibido la visita de algún ejemplar de oso pardo. Más frecuentes son las visitas de especies de nuestro entorno más cercano tales como rapaces, corzos, cervatillos, reptiles y tejones.