Ciencia España , Burgos, Viernes, 06 de abril de 2018 a las 12:34

La inteligencia artificial indica que la acumulaci贸n de huesos de Atapuerca puede ser de origen natural

Un estudio internacional compara los yacimientos de la Sima de los Huesos y de Dinaledi (Sud谩frica) con restos de diferentes tipos y apunta a que es poco probable que tengan un origen intencional y ritual

José Pichel Andrés/DICYT La acumulación de restos óseos en los yacimientos de la Sima de los Huesos de Atapuerca (Burgos) y de Dinaledi, en la cueva Rising Star (Sudáfrica) tiene una alta probabilidad de haberse producido por causas naturales, según un estudio internacional basado en inteligencia artificial que ha sido publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS). Hasta ahora estos fósiles hacían pensar a los paleontólogos que los homínidos de hace 500.000 años habrían acumulado a propósito los huesos de sus congéneres fallecidos e incluso que esto podía ser indicio de algún rito funerario, pero esta investigación lo pone en duda.

 

“Nos hemos llevado una sorpresa porque la interpretación que se ha hecho hasta ahora es que la acumulación de huesos en los dos casos era de origen antrópico”, explica a DiCYT Manuel Domínguez-Rodrigo, investigador del Instituto de Evolución en África de la Universidad de Alcalá de Henares, uno de los autores del estudio.


En la Sima de los Huesos de Atapuerca se encontraron restos de 28 individuos de Homo heidelbergensis, mientras que en Dinaledi los fósiles pertenecían al menos a 15 Homo naledi.


Los investigadores compararon estos dos casos con otros yacimientos de tipología claramente definida: conjuntos funerarios humanos no alterados, conjuntos funerarios alterados por diferentes circunstancias como animales o canibalismo, acumulaciones de primates intencionadas y acumulaciones de primates provocadas por procesos físicos naturales.

 

Novedosa aplicación de la inteligencia artificial

 

Para ver similitudes y diferencias, los científicos utilizaron cinco algoritmos diferentes y cuatro de ellos indicaron con un gran nivel de seguridad que el grupo al que más se parecen es al último, el del origen natural. “Somos el primer equipo que aplica la inteligencia artificial en este tipo de estudios”, destaca el experto.

 

Los científicos que han liderado en las últimas décadas las excavaciones de Atapuerca siempre han pensado que se trataba de una acumulación intencional, aunque no estaban seguros de que tuviera un carácter ritual. Este artículo abre el debate y tiene muchas implicaciones en la comprensión del comportamiento de los homínidos que antecedieron al ser humano actual. “No podemos estar seguros de que existiera una deposición de huesos realizada a propósito anterior a 100.000 años”, apunta Manuel Domínguez-Rodrigo.

 

La incógnita de la ausencia de gran parte del esqueleto


Este análisis no encuentra ningún elemento ritual y, aunque no descarta por completo una acumulación realizada a propósito, indica que es muy poco probable. Uno de los elementos clave es la ausencia de gran parte de los esqueletos de los individuos y esto no encaja con una deposición humana, pero tampoco con la posterior intervención de carnívoros. En la Sima de los Huesos, la hipótesis de que los osos podrían haber alterado los restos se queda corta para explicar estos nuevos datos.


En cambio, un lento proceso geológico en el que se hubiera producido un desplazamiento de los huesos sí podría explicar los restos hallados. Tampoco se descartan otras opciones, como que un proceso químico hubiera destruido las partes del esqueleto ausentes, pero en este caso sólo sería válido para la cueva sudafricana, donde hay sedimentos que se podrían corresponder con esta hipótesis.

 

Nuevas interpretaciones


En cualquier caso, el debate queda abierto. “En su momento, estos hallazgos fueron excepcionales y ante el desconcierto los científicos pensaron que la mejor explicación era que la acumulación de restos fueran obra de otros homínidos, pero no conocemos todos los procesos que han podido ocurrir en estas cuevas y ahora nosotros no demostramos que su origen sea natural, pero sí dejamos abierta esa nueva posibilidad”, agrega el investigador de la Universidad de Alcalá de Henares.

 

Referencia bibliográfica 

 

Hominin skeletal part abundances and claims of deliberate disposal of corpses in the Middle Pleistocene. Charles P. Egeland, Manuel Domínguez-Rodrigo, Travis Rayne Pickering, Colin G. Menter and Jason L. Heaton. Proceedings of the National Academy of Sciences Apr 2018, 201718678; DOI:10.1073/pnas.1718678115.