Alimentación España , León, Jueves, 15 de enero de 2009 a las 17:17

La Junta aprueba el plan de recuperación y protección del urogallo cantábrico en Castilla y León

Se estiman 164 ejemplares de esta especie en peligro de extinción en la autonomía

AMR/DICYT El Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León ha aprobado hoy el decreto que establece el Plan de Recuperación y Protección del Urogallo Cantábrico en Castilla y León con el fin de detener su declive poblacional y recuperar el tamaño de la población en valores de 500 ejemplares adultos. En 2005, el número de urogallos que habitaban el Sur de la Cordillera Cantábrica es de, aproximadamente, 164 ejemplares adultos.

 

Para ello, durante los seis primeros años de vigencia del plan se plantean como metas concretas alcanzar un número de ejemplares adultos igual o superior a 250 individuos y conseguir una ampliación de su actual área de distribución, que en la actualidad cubre una superficie aproximada de 728 Km2, hasta llegar a alcanzar los 1.000 Km2, según informó la Junta.


El plan de recuperación del urogallo cantábrico establece las áreas que tendrán la consideración de zonas de especial protección para la especie, localizadas en las provincias de León y Palencia, y con él se regulan las áreas críticas, declarando como tales aquellos territorios incluidos dentro del ámbito de aplicación del plan de recuperación que se consideren vitales para la supervivencia y recuperación de la especie. Asimismo, plantea erradicar el furtivismo, evitar la mortalidad accidental y compatibilizar la gestión de la actividad cinegética con la conservación del urogallo cantábrico.

 

Otro de los objetivos de la Consejería de Medio Ambientes es incluir medidas para la conservación y el manejo del hábitat, como la conservación e incremento de las masas boscosas y el respeto hacia microhábitats singulares; y para garantizar la conservación cinegética de la especie. Entre éstas últimas figurará un plan de cría en cautividad para la constitución de una reserva genética, el mantenimiento de un registro de urogallos cautivos y la creación de un centro de referencia del urogallo cantábrico. Por último, el plan estima actuaciones en materia de información, sensibilización e investigación, la creación de un fondo de documentación, la incorporación de todos los datos sobre el urogallo al Sistema de Información Geográfica del Medio Natural, y la realización de un censo cada cinco años.
 

Peligro de extinción

 

El urogallo fue catalogado "en peligro de extinción” en julio de 2005. Se le reconocen 12 subespecies, de las que dos habitan en la Península Ibérica. De las dos, es la que puebla la Cordillera Cantábrica (Tetrao urogallus cantabricus) la que tiene las peores perspectivas de futuro a medio plazo pues sus poblaciones comienzan a estar aisladas entre sí sin posibilidad de renovación genética. Se estima que existen un total de 300 ejemplares entre Asturias y las provincias de León y Palencia. En el declive de esta reliquia biológica de la era glaciar se han combinado circunstancias climatológicas y el deterioro de su hábitat (ya que vive en regiones boscosas y frías, en regresión desde la última edad de hielo) y la excesiva presencia de mamíferos ungulados (como el ganado ovino) en su entorno.

 

El plan que se pondrá en marcha cuando sea publicado en el Boletín Oficial de Castilla y León supone la culminación de casi tres años de concrección de medidas en torno a la protección de esta gallinácea. El borrador se comenzó en 2006. En la otra vertiente de la cordillera, el plan de protección del ave elaborado por el Gobierno de Cantabria se pondrá en marcha en 2009.