Tecnología España Salamanca, Salamanca, Lunes, 20 de mayo de 2013 a las 18:10

Las universidades de Salamanca y Osaka impulsan la investigación en materiales inteligentes

La institución académica salmantina y la japonesa suscriben un acuerdo para apoyar el trabajo en el campo de la nanotecnología

AFM/DICYT La Universidad de Salamanca y la Universidad de Osaka (Japón) han firmado esta mañana un convenio de colaboración que, entre otras cosas, servirá para impulsar la investigación en materiales inteligentes, concretamente, en nanotecnologías aplicadas a los tejidos. El rector de la Universidad de Salamanca, Daniel Hernández Ruipérez, y el presidente del Instituto Tecnológico de la Universidad de Osaka, Yoshizazu Nishikawa, han suscrito el acuerdo.

 

Ambas partes han coincidido en que el principal objetivo es promover el intercambio internacional, para poder enviar a profesores y alumnos a trabajar y estudiar fuera de sus fronteras. “Espero que sea sólo el comienzo de una colaboración más extensa”, afirmó el rector de la Universidad de Salamanca en declaraciones recogidas por DiCYT. Asimismo, Ruipérez señaló que este convenio es una manera de transferir conocimientos a la sociedad y que abre vías de investigación, progreso industrial y la posibilidad de generar empleo.

 

La Universidad de Osaka es una de las mejores en todo el mundo en cuanto al uso de la nanotecnología aplicada a tejidos se refiere. Por eso, el acuerdo favorecerá un mayor desarrollo de equipos de investigación como el grupo BISITE, dirigido por Juan Manuel Corchado, decano de la Facultad de Ciencias, que ya estaba en contacto con la institución académica japonesa. 

 

La Universidad de Osaka

 

La actual Universidad de Osaka se fundó en 1922 como una escuela técnica de ingeniería y no fue hasta el año 1949 cuando adquirió la categoría de institución universitaria. En la actualidad, cuenta con las facultades de Ingeniería, Tecnología y Ciencia de la Comunicación y Propiedad Intelectual; y dos campus, llamados Hirakata Campus y Omiya Campus. El primero de ellos cuenta con un laboratorio de realidad virtual, dónde los investigadores trabajan con robótica e imágenes 3D. El segundo es el encargado de los nanomateriales.

 

Esta institución destaca también por tratar de resolver los problemas derivados del tsunami que asoló el país nipón hace dos años, de manera que sus expertos trabajan, por ejemplo, en la mejora de las infraestructuras que pueden verse afectadas por este tipo de sucesos.