Salud España Navatejera, León, Martes, 01 de diciembre de 2009 a las 14:00

Le贸n Farma desarrolla actualmente cuatro f谩rmacos innovadores relacionados con la anticoncepci贸n

Los proyectos se encuentran en fases diferentes de desarrollo

Antonio Martín/DICYT Muchas parejas conocen métodos suficientes para impedir o reducir la fecundación al mantener relaciones sexuales. En algunos casos como la píldora, llegan a utilizar productos químicos y hormonales. Las empresas farmacéuticas de este sector se encuentran inmersas en una carrera para conseguir productos más eficientes para estos usuarios. Una de ellas es León Farma, que en la actualidad realiza cuatro proyectos de I+D en esta materia. Desde su planta de Navatejera (Villaquilambre, en las proximidades de la capital provincial), su centro de I+D pretende sacar al mercado cuatro productos diferentes relacionados con este campo: desde un anticonceptivo vía vaginal a nuevas moléculas que proporcionen mejores resultados.

 

Los cuatro proyectos, indican desde la empresa, que pertenece al grupo Chemo, se encuentran en diferentes estadíos, desde los momentos incipientes de las ideas empresariales, hasta la fase de equivalencia y registro, pasando por el desarrollo galénico y analítico para la fabricación de los lotes pilotos. No es el único sector de trabajo en el que se mueve la empresa, ya que también produce genéricos, generalmente en el ámbito de la salud femenina.

 

Anticonceptivo vía vaginal y con nuevas moléculas

 

La primera línea de investigación se basa en la combinación estándar de estrógeno y protestágeno habitual en las píldoras anticonceptivas, pero en un medio diferente. "La innovación está en la forma de liberación de estos activos", explica a DiCYT José Luis Velada, director del centro de I+D. En este nuevo fármaco, la administración se produciría vía vaginal, en vez de oral, como es habitual. Según recuerda Velada, el desarrollo viene de lejos, ya que "en 2006 ya se barajaba en trabajar en formas novedosas de este tipo de medicamentos". Esta investigación está en fase incipiente y a mediados de 2010 se deben tener los primeros resultados y analizar si se debe tomar la decisión de continuar con la investigación. Alrededor de 15 meses después, según los cálculos con los que trabaja la empresa, se podría obtener el fármaco se podría llevar a la fase clínica.

 

La segunda línea de innovación está dirigida a la búsqueda de nuevas moléculas para el ámbito anticonceptivo. En este caso, además del desarrollo farmacéutico, en la fase clínica se necesitará comprobar la equivalencia del nuevo fármaco con el producto de referencia y conocer la eficacia de este producto novedoso. "Esto supondrá un gran trabajo con muchos pacientes y varios centros", indica Velada. "En el caso de esta investigación, debemos tener claro cuáles son las ventajas que queremos proporcionar al cliente, cómo vamos a presentar esta molécula, cómo vamos a proteger este desarrollo", indica el responsable de I+D de la compañía. Una vez definida toda esta estrategia, los galénicos desarrollarán el producto que se ajuste a ella. “Son cuestiones que no se ven, pero una vez llega el comprimido al mercado hay un trabajo previo enorme”, indica Velada. La línea se encuentra, por ello, en fase incipiente.

 

Con socios

 

Las otras dos línas se desarrollan en colaboración con otro socio. En el caso de la tercera iniciativa, se trata de obtener una molécula de última generación para llevarla a registro. En este trabajo bilateral, León Farma ha realizado el desarrollo del nuevo compuesto y en estos momentos está trabajando en el escalado industrial, mientras que el otro socio ha sido el encargado de proporcionar el compuesto "No existe en el mercado una molécula de origen sintético en el campo de la contracepción idéntica a este tipo", relata el experto. La idea básica en este tipo de desarrollos industriales con moléculas de nueva generación es que, con menos cantidad que las convencionales, se puede obtener el efecto terapéutico deseado. "Idealmente, con moléculas de muy alta actividad se pretende reducir la dosis y reducir los efectos secundarios", prosigue Velada. El otro objetivo en este caso es alargar la acción terapéutica de la píldora anticonceptiva, respecto a lo existente en el mercado. “Si una píldora protege durante dos horas, en este caso permitiría proteger durante ocho”, ejemplifica el especialista. Los estudios clínicos realizados han proporcionado una mejora patente en ambos casos, indica el representante de la empresa farmacéutica. Se espera que llegue al mercado en 2012.

 

La cuarta línea quiere dar un giro al uso de una de las moléculas existentes en el campo de la contracepción. Existen fármacos que, aplicados para un tipo de dolencia, se comprobó su eficacia en otros tratamientos. Un ejemplo muy claro de esta nueva aplicación es la Viagra (que se utilizaba para condiciones cardiacas y tuvo una explosión en el uso de la disfunción erectil). Este desarrollo también se realiza conjuntamente con otro socio. La compañía es cauta a la hora de explicar estos nuevos usos y de los plazos del desarrollo. "Había ciertos indicios que se podría funcionar en el ámbito de enfermedades de baja incidencia", vislumbra.

 

La empresa

 

León Farma cuenta con más de 60 trabajadores en la actualidad, la mayoría farmacéuticos o biólogos. Integrado en el grupo argentino Chemo, el negocio está integrado de forma vertical. Los compuestos activos proceden de tres plantas del conglomerado empresarial en Alcalá de Henares (Madrid), Saronno (Italia) y China. En León Farma se realiza la investigación y se solicita los registros para poder operar en diferentes mercados. Aunque en origen se dirigía al mercado Iberoamericano, León Farma cuenta con registros ya de la Agencia Estadounidense del Medicamento (FDA), la brasileña y de varios estados de la Unión Europea.