Alimentación España , León, Lunes, 23 de marzo de 2009 a las 19:32

Los ciervos de Picos de Europa están afectados por parásitos gastrointestinales en cargas medias-bajas

Pueden ser agentes patógenos con efectos letales en años de nieves como el actual, según se desprende del trabajo realizado por el Departamento de Sanidad Animal de la Universidad de León

AMR/DICYT La población de ciervos de los parques regional y natural de Picos de Europa en la provincia de León están afectados por especies parasitarias en cargas medias-bajas y sin efectos clínicos o letales directos, según ha determinado un estudio del Departamento de Sanidad Animal de la Universidad de León. Estos parásitos poseen un potencial patógeno con efectos letales para esta especie de ungulados, reintroducida en la Cordillera Cantábrica en los años 60 después de que apenas quedaran individuos durante el siglo XX, si las condiciones ambientales son adversas, como ha ocurrido este año, en el que se han producido varias nevadas.

 

El estudio de los ciervos de la provincia de León, cifrados en 1.600, parte de un análisis comparativo entre las diferentes poblaciones de la subespecie ibérica (Cervus elaphus hispanicus) de tres entornos diferentes: la Cordillera Cantábrica, los Montes de Toledo y Sierra Morena. Para ello, en 2005 las universidades Complutense de Madrid, de Córdoba y de León se unieron en un proyecto comparativo que verá sus resultados definitivos en 2011. En el estudio de campo en la parte leonesa, se han tomado muestras de 110 ejemplares del entorno de la reserva regulada de caza de Riaño, que ocupa 78.000 hectáreas de los parques regional y natural de Picos de Europa. El trabajo ya ha deparado datos significativos.

 

Los animales presentan cargas medias-bajas de especies parasitarias y los efectos son subclínicos y subletales. Si hubieran poseído cargas parasitarias altas, los ejemplares hubieran sido más vulnerables a los depredadores o en la competencia entre ellos en épocas de celo y habría un mayor número de fallecidos. "Tampoco hemos encontrado manifestaciones clínicas, pero creemos que las necesidades vitales de los ciervos pueden estar disminuidas por efecto de los parásitos y se pueden manifestar en el estado de la cornamenta o en los periodos de gestación", explica a DiCYT la investigadora Angélica Martínez Delgado.

 

Nematodos y trematodos

 

La mayor parte de los parásitos que atacan a la cabaña de ciervos leonesa son gastrointestinales, ubicados en el cuajar o abomaso (una de las cuatro partes del estómago) de los individuos. En todos los casos analizados, se halló el nematodo gastrointestinal Sticuloptegae sticuloptera, "el más imporante en los ciervos del norte de España. También había presencia significativa de prevalencia de los trematodos Dicrocoelium dendriticum (en el 50% de los individuos) y Fasciola hepatica (en el 12%). Uno de los objetivos del trabajo es demostrar diferencias en la incidencia de estos parásitos en las diferentes poblaciones de ciervos ibéricos que habitan en España. "Creemos que, a diferencia de climas más templados, los de la Cordillera Cantábrica están más expuestos a los efectos patógenos por las condiciones climáticas", expresa Martínez Delgado.

 

Los 1.600 ciervos que actualmente viven en la provincia de León se presentan como una población estable y en expansión, que presenta una significativa desproporción entre sexos, con un mayor número de hembras respecto a machos. Practicamente extinguida a principios del siglo XX, la especie fue reintroducida en los años 60 por su valor ecológico y cinegético. La recogida de muestras de estos animales se realizó entre los años 2005 y 2007 en las cuatro estaciones de cada año. En octubre de 2008, los primeros resultados fueron llevados al congreso de la Asociación Europea de Fauna Silvestre, celebrado en Rovinj (Croacia).