Ciencia España , Valladolid, Lunes, 15 de septiembre de 2008 a las 16:39

Los expertos apuestan por las nanopartículas en campos como la Medicina o la Industria

Un congreso internacional reúne durante esta semana en Valladolid a 250 científicos en torno a estas estructuras

YG/DICYT Las investigaciones en torno a las nanopartículas se han abierto paso en campos como el de la Medicina o la Industria, con prometedores resultados en el tratamiento del cáncer o aplicaciones medioambientales. Unos 250 científicos de todo el mundo se reúnen durante esta semana en Valladolid en el marco del 14 Internacional Symposium on Small Particles and Inorganic Clusters (ISSPIC-14), un encuentro bianual que se celebra por primera vez en España y que pretende estimular la creación de nuevos temas de estudio interdisiplinares y propiciar aplicaciones e innovaciones de la nanociencia además de presentar los últimos avances en este campo. 

 

En palabras del profesor del Departamento de Física Teórica, Atómica y Óptica de la Universidad de Valladolid y responsable del congreso, Julio Alonso, durante muchos años la comunidad científica se ha afanado en conocer “cómo son, la estructura y propiedades” de estas partículas formadas por decenas de átomos, de mayores dimensiones que las moléculas y de un tamaño equivalente a la milmillonésima parte de un metro. Sin embargo, la tendencia actualmente, afirma, es la búsqueda de aplicaciones prácticas en campos como la Química, la Medicina o la Electrónica.

 

En el primero de ellos, uno de los asuntos que se abordarán durante el encuentro será la aplicación de las nanopartículas en los procesos de catálisis. “Los coches tienen catalizadores que lo que logran es que lo gases que salen por el tubo de escape no sean venenosos. Sin embargo, parece que estas nanopartículas podrían sustituir a los catalizadores actuales”, explica el experto. Otra de las aplicaciones con más futuro se refiere al futuro uso del hidrógeno como combustible. En particular, a la obtención de este elemento a partir del agua. Aquí, el papel de las nanopartículas sería el de descomponer el agua, compuesto por una molécula de oxígeno y otra de hidrógeno.

 

Los resultados del uso de nanopartículas están siendo “prometedores” también en el campo de la Medicina y en concreto en el tratamiento de tumores cancerosos. Alonso pone el ejemplo de nanopartículas de un material como el oro que, “se pueden inocular en el torrente sanguíneo para que lleguen a los tumores y, con la aplicación de radiaciones, lograr quemar el tumor”. También se está trabajando sobre nanopartículas que actúan por sí mismas, es decir, que son reactivas en sí, explica el investigador.

 

La mayor parte de estas aplicaciones se están aun ensayando en modelos animales aunque Alonso asegura que ya hay ensayos experimentales con humanos que están dando muy buenos resultados en el tratamiento del cáncer y “las expectativas son muy buenas”. La electrónica es otro de los campos donde las nanopartículas están encontrando una mayor aplicación debido a que cada vez se fabrican aparatos más potentes pero de menores dimensiones. Esto lleva a que llegue un momento “ en que los componentes son de unos tamaños que entran dentro de la nanociencia o las nanopartículas”.
 

Búsqueda de materiales para almacenar hidrógeno
El Grupo de Física de Nanoestructuras del Departamento de Física Teórica, Atómica y Óptica de la Universidad de Valladolid del que forma parte del profesor Alonso se dedica sobre todo al estudio de procesos catalíticos en la superficie de las nanopartículas, así como al campo de las simulaciones. Sin embargo, desarrolla una línea de investigación que trata de determinar cuáles don los mejores materiales para la absorción del hidrógeno ya que se espera sea el combustible del futuro. Almacenar el hidrógeno es más difícil que otras sustancias como el butano, explica el experto, ya que los recipientes tendrían que tener las paredes mucho más gruesas y pesarían mucho. El grupo de investigación trabaja actualmente con materiales porosos (compuestos por poros microscópicos) como los más idóneos para almacenar hidrógeno. “Parecen los materiales más prometedores” para esta función. Uno de las apuestas del grupo son los materiales basados en el carbón.