Tecnología España , Valladolid, Martes, 04 de mayo de 2004 a las 20:05

Los expertos demandan más facilidades para las universidades a la hora de poner en marcha empresas de base tecnológica

El rector de Valladolid pide al Gobierno nacional cambios legislativos que flexibilicen el sistema

BGA/DICYT El I Congreso de Creación de Empresas de Innovación y Base Tecnológica en la Universidad, organizado a través del programa Futurinnova de la Junta de Castilla y León y la Agencia de Desarrollo Económico, comenzó hoy en Valladolid con la presencia del rector de la universidad, Jesús María Sanz Serna y del director de la Agencia de Desarrollo Económico (ADE), Juan Rodríguez Población. En su intervención, Sanz Serna solicitó al Gobierno central cambios en la legislación para "acabar con el armazón de trabas legales que existen" a la hora de la creación de empresas desde las universidades.

Durante la inauguración se hizo especial hincapié en algunos datos que señalan la productividad de las empresas españolas, ya que aportan el 8% de la investigación que se realiza en Europa, pero cuentan sólo con el 4% de los recursos, por lo que la transferencia de tecnologías desde las universidades a las empresas y la sociedad se presenta como un pilar importante para el desarrollo.

En este sentido, se apuntaron algunos de los problemas con los que se encuentra la universidad, como institución, para poder hacer esa transferencia de Ciencia y Tecnología, y que giran entorno a la situación jurídica de la entidad, la escasez de recursos financieros y la falta de cultura de transferencia de conocimiento entre los propios investigadores.

Respecto a los problemas jurídicos a que debe hacer frente la universidad, el rector indicó que se ha ido avanzando con las últimas leyes, pero que aún se tiene que flexibilizar más el sistema, e indicó que las reformas que se prevé que puedan realizarse en esta legislatura “deberían aprovecharse para acabar con el armazón de trabas legales que existen”.

Por su parte, el director de la ADE indicó que la Junta ha creado el programa Futurinnova, dotado con 42 millones de euros, que pretende crear 100 empresas de este tipo en dos años, de modo que ayuden a transformar los resultados científicos en crecimiento económico.

Durante dos días, el congreso analizará detenidamente cada uno de estos puntos y contará con experiencias de otras comunidades autónomas y otros países, para conocer cual es su experiencia al respecto y cómo han hecho frente a los problemas comunes. 

Pocas patentes


La primera de las ponencias del día de hoy estuvo a cargo del director del Parque Científico de la Universidad de Barcelona, Mario Rubiralta, quien señaló que uno de los indicadores claros del avance en materia de transferencia de la investigación es el número de patentes, un parámetro en el que España aún se encuentra por detrás de otros países europeos.

Rubiralta insistió en la necesidad de hacer que la transferencia de ciencia a las empresas se haga de modo que la entidad que aporta el conocimiento obtenga beneficios, ya que se trata de la retroalimentación necesaria para los avances. Desde su punto de vista esto se ha ido consiguiendo a través de la creación de estructuras como los parques científicos y tecnológicos.

En este sentido, el ponente señaló la importancia que van a tener las empresas conocidas como spin off (creadas en las universidades a partir de investigaciones surgidas en su seno) y también las incubadoras de empresas. Sin embargo, reclamó el modo de conseguir que el tejido productivo permita que los beneficios de explotación de las investigaciones se queden, al menos en parte, en la entidad que las ha hecho posibles y que no se desvinculen de las universidades en cuanto se producen las ampliaciones de capital.

Este primer congreso continúa mañana con la presencia, entre otros, de representantes de universidades francesas y belgas y con la ya inaugurada mini Feria de empresas de innovación y base tecnológica, que se desarrolla en el mismo Palacio Conde Ansúrez.