Medir谩n el perfil metab贸lico de las vacas lecheras para mejorar su producci贸n
UCR/DICYT Las vacas productoras de leche son animales excepcionales, al punto de que son catalogadas por algunos finqueros como máquinas fabricantes de leche, las cuales requieren de cuidados especiales. Dentro de poco tiempo, las vacas de la raza Holstein no tendrán por qué reducir la cantidad de litros de leche, producto del desgaste energético del animal durante el periodo de lactancia temprana y mucho menos los finqueros afrontarán pérdidas económicas por una escasa producción.
Un estudio de la Clínica de Especies de Producción de la Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad Nacional (UNA), determinó que mediante el análisis del perfil metabólico se puede diagnosticar la carencia en minerales, carbohidratos, lípidos y proteínas de las vacas lecheras durante el periodo de producción. En esta etapa, si no cuenta con un adecuado balance alimenticio, la vaca puede ver comprometida su salud y la producción diaria de leche.
Dicha investigación estuvo a cargo del veterinario Jaime Murillo, el estudiante Raúl Padilla y la especialista Ana Meneses, quienes por vez primera en el país lograron diseñar rangos de referencia para metabolitos sanguíneos de las vacas productoras de leche, separándolas según su estatus productivo (lactancia temprana, avanzada y periodo seco). Algunos de ellos son hematocrito, hemoglobina, leucocitos, calcio, fósforo, magnesio y enzimas hepáticas, entre otros.
Leche en potencia
Para la realización de este estudio se tomaron en cuenta seis fincas especializadas en producción lechera de la zona del volcán Poás, cuya característica primordial es contar con hatos de vacas excepcionales de la raza Holstein, las cuales producen en promedio entre 25 a 30 litros de leche diarios, llegando a alcanzar niveles de hasta 50 litros diarios. Además, cuentan con equipos mecanizados para dos ordeños al día, personal calificado, técnicas de inseminación artificial en lugar de toros y veterinarios que ejecutan chequeos de forma regular.
La vaca Holstein o frisona, es una raza vacuna de la región de Frisia y del norte de Holanda, en los Países Bajos, que destaca por su alta producción de leche y su buena adaptabilidad al clima. Estas características hicieron que fuera adoptada en ganaderías de numerosos países, siendo actualmente la raza más común en todo el mundo en granjas para la producción vacuna de leche. Este animal nace con un peso aproximado de 40 kg. Las vacas Holstein llegan a pesar alrededor de 600 kg, mientras que los toros alcanzan hasta los 1000 kg.
Murillo explicó que los requerimientos nutricionales de una vaca para dar esa cantidad de leche son muy elevados y su nivel genético implica que estos animales necesitan dietas especializadas. A pesar de ello, en la mayoría de las ocasiones y en virtud de su fortaleza física tienden a enmascarar la sintomatología clínica.
“A partir de ahí nos dimos a la tarea de determinar cuáles son los perfiles metabólicos normales para vacas especializadas en producción de leche que viven en Costa Rica. Dicha herramienta será de gran ayuda para los productores y profesionales que trabajan en el campo desarrollando programas de medicina preventiva del hato”, recalcó Murillo.
Balance alimenticio
En la investigación se demostró que una vez que la vaca da a luz, ésta disminuye sus valores hematológicos, tales como la hemoglobina, el hematocrito, fósforo, calcio y magnesio, por lo que ellas empiezan a consumir una cantidad considerable de sus proteínas para poder producir la leche. Aquí es donde estos animales requieren de un mejor balance.
“Ante este panorama decidimos separar las vacas del estudio en tres grupos fisiológicos; vacas secas, en lactación temprana y en lactación avanzada para comparar sus valores sanguíneos y así demostrar que estos animales durante la lactación temprana, de 0 a 30 días después del parto, afrontan su periodo más crítico; es decir que su cuerpo demanda de más energía para producir leche”, recalcó el veterinario.
Murillo manifestó que gracias a este estudio, pionero en América Latina, el laboratorio de Análisis Clínico de la Escuela de Medicina Veterinaria de la UNA, cuenta con los valores apropiados para determinar, por medio de la muestra de sangre, el balance alimenticio con el que debe contar el animal, por ejemplo si requiere fósforo o calcio.
Al poner en operación este servicio, el productor podrá contar con una lista en donde se le especificará los valores en los que se encuentran sus animales y cuáles deberían ser los rangos normales. Luego se le hace una recomendación de los aspectos que deben mejorar como por ejemplo nutrición, balance mineral o manejo del hato.