Salud España , Valladolid, Mi茅rcoles, 20 de mayo de 2009 a las 14:49

Un centro a la vanguardia para el estudio de la discapacidad f铆sica

Aspaym Castilla y Le贸n inaugura su Centro de Investigaci贸n en Discapacidad F铆sica (Cidif), que busca paliar la ausencia de investigaci贸n en nuevas terapias

Cristina González/DICYT La Asociación de Parapléjicos y Grandes Discapacitados Físicos (Aspaym) de Castilla y León ha presentado hoy en Valladolid las instalaciones de su Centro de Investigación en Discapacidad Física (Cidif), que pretende paliar la ausencia de investigación en nuevas terapias. Para ello, cuenta con los últimos avances tecnológicos y un cualificado equipo compuesto por médicos, fisioterapeutas, psicólogos y terapeutas ocupacionales, lo que le convierte “en un centro a la vanguardia en el estudio de la discapacidad física”. Así lo han puesto de manifiesto en el transcurso del acto de inauguración Milagros Marcos Ortega, gerente de Servicios Sociales de la Junta; Francisco Sardón Peláez, presidente de Aspaym Castilla y León, y Juan Azael Herrero, director del proyecto. 

 

Tal y como ha recordado el presidente de la Asociación en declaraciones recogidas por DiCYT, hace 11 años se puso en marcha el Centro de Rehabilitación, que en la actualidad da servicio a más de 250 personas. Entonces, ésta era “la principal demanda” de los lesionados medulares, quienes una vez finalizado el periodo de rehabilitación estipulado por el sistema de sanitario sufrían un deterioro progresivo en su estado de salud. En la actualidad, y tras haber adquirido la experiencia necesaria, Aspaym se ha dado cuenta del vacío existente en materia de análisis de nuevas terapias y de la idoneidad de la aplicación de las existentes en discapacitados físicos.

 

Por este motivo, y en base a mejorar la calidad de vida de los lesionados, el Cidif se ha marcado como objetivo realizar valoraciones periódicas del sistema músculo-esquelético y del control postural de los afectados, para observar si se mantiene un grado de funcionalidad adecuado y, en caso de constatar deterioros importantes, recomendar un trabajo de rehabilitación adecuado. Por otro lado, evaluará si la rehabilitación realizada es efectiva o si deben modificarse los tratamientos; valorará la pertinencia de las nuevas terapias mediante ensayos clínicos de las diferentes patologías, y asesorará a los discapacitados físicos sobre la adaptación individualizada de ayudas técnicas.

 

Herramientas disponibles

 

Para realizar las investigaciones el Cidif ha adquirido varios equipos. Entre ellos se encuentra un sistema de captura y análisis del movimiento en 3D. A través de este dispositivo, dotado de siete cámaras, se examinará la marcha humana normal y la patológica, se ajustarán de manera personalizada prótesis y órtesis, y se adaptarán ayudas técnicas a las características antropométricas y funcionales de cada persona. Por otro lado, dos plataformas medirán el equilibrio y las fuerzas de reacción terrestres durante la marcha y otros gestos (carrera, saltos, posturas y pruebas de fuerza máxima).

 

Otra de las herramientas adquiridas es un densitómetro óseo, utilizado para el estudio de la composición corporal (tejido óseo, tejido grado y tejido magro) y equipado con una base de datos de normalidad en función de parámetros como el sexo o la edad. Este aparato posibilitará explorar cualquier región del cuerpo. Asimismo, un ecógrafo portátil permitirá comprobar la arquitectura muscular y de la circulación sanguínea periférica.


Finalmente, un dinamómetro isocinético desarrollado en Estados Unidos servirá para valorar la fuerza muscular a velocidad constante durante todo el arco de movimiento articular. En discapacitados físicos se trata de una herramienta “indispensable” para la valoración objetiva del grado de espasticidad (contracción permanente de un músculo que refleja un trastorno motor del sistema nervioso).
 

Colaboración con varios centros

Aspaym Castilla y León ha suscrito convenios marco en materia de investigación con la Universidad de Valladolid y con la Universidad Europea Miguel de Cervantes; y también colabora con la clínica Schulthess de Zurich, con el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo y con las consejerías de Sanidad y Familia e Igualdad de Oportunidades. La principal meta es mejorar la calidad de vida de las personas discapacitadas y la demanda de este colectivo de normalizar su vida en todos los ámbitos. En la actualidad cuenta con más de 2.000 socios en toda la comunidad y 95 trabajadores.