Salud España , Salamanca, Viernes, 07 de noviembre de 2008 a las 18:13

Un estudio demuestra que la hidatidosis sigue siendo una enfermedad end茅mica en Castilla y Le贸n

Entre 10 y 12 casos por cada 100.000 habitantes quedan registrados al a帽o, seg煤n los datos presentados hoy en una jornada cient铆fica en Salamanca

JPA/DICYT La hidatidosis sigue siendo una enfermedad endémica en Castilla y León, según los resultados de un estudio presentado hoy en una jornada sobre esta patología organizada por la Asociación Española de Hidatidología en el Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (Irnasa). Javier Pardo Lledías, científico de Medicina Interna del Hospital Clínico Universitario de Salamanca y responsable de la investigación, ha asegurado que se registran entre 10 y 12 casos al año por cada 100.000 habitantes, basándose en las cifras obtenidas en la provincia salmantina.

 

La hidatidosis es una patología de origen parasitario provocada por una tenia intestinal del perro y de otros animales domésticos que se puede transmitir al ser humano. Aunque en España ha dejado de ser una enfermedad de declaración obligatoria en algunas comunidades autónomas, aún está lejos de estar erradicada. "A partir de 1995 los datos son poco exactos, así que nosotros hemos realizado un trabajo que demuestra que la enfermedad sigue teniendo un carácter endémico en nuestra población y, concretamente, en Salamanca", ha señalado el experto en declaraciones a DiCYT. Fuera de nuestro país, la hidatidosis sigue siendo un enfermedad importante en muchos países del mundo, sobre todo en el Norte de África, sur de Europa, China y Sudamérica.

 

Según Pardo, esta enfermedad "es una zoonosis, el hombre se infecta porque los perros la transmiten, puesto que son los que tienen los gusanos en fase reproductiva. El ganado, fundamentalmente el ovino, juega un papel muy importante en el proceso, ya que se infecta al comer los huevos del gusano, y para cerrar el ciclo, el perro debe ingerir las vísceras del animal enfermo", explica. Es decir, que para mantener el ciclo se necesitan perros infectados y ganado ovino que también lo esté, de manera que sólo puede haber hidatidosis en zonas donde se den estas condiciones, así que "debería ser una enfermedad absolutamente controlada, pero hoy en día todavía es difícil hacerlo incluso en zonas donde el nivel higiénico y sanitario es alto, como en España", comenta el especialista.

 

Fernando Díaz Torres, jefe del Servicio Territorial de Sanidad de Salamanca, también ha participado en la jornada del Irnasa para explicar las medidas que se toman contra la enfermedad. "Desde la administración sanitaria recomendamos una serie de hábitos acerca del estilo de vida de la población que está en contacto con el ganado y su relación con los animales de su propiedad, como la vigilancia de lo que comen, evitando la ingesta de vísceras crudas, la importancia de desparasitarlos, la adecuada limpieza personal, y también la importancia de lavar adecuadamente las frutas y verduras, porque se puede transmitir la enfermedad a través del agua si se usa para el riego", ha comentado. Por otra parte, "tenemos en plantilla a inspectores que son veterinarios oficiales que controlan toda la cadena alimenticia, inspecciones en los mataderos para ver si hay quiste hidatídico, así como análisis de los animales muertos en matanzas domiciliarias y cacerías".

 

Escasez de datos y recursos

 

Finalmente, Luis Colón García, presidente de la Asociación Española de Hidatología, ha reconocido que la falta de datos nacionales dificulta la investigación y la lucha contra la patología. "Para nosotros sería mejor que en toda España fuese una enfermedad de declaración obligatoria, aunque lo sigue siendo en aquellas Comunidades con una gran incidencia. Sin embargo, estas diferencias nos impiden tener una visión general del país", apunta.


Precisamente, uno de los problemas a la hora de realizar investigaciones sobre hidatidosis es que la escasa incidencia y el "relativo éxito que se tiene en la lucha contra ella" hacen que la cantidad de recursos que se destinan a ella sea escasa, "porque no se considera una enfermedad importante", declara Luis Colón. "Cada vez hay menos investigadores que se animan a seguir esta línea, pero los que siguen trabajando en ella obtienen un gran reconocimiento internacional. Hoy en día hay menos grupos que antes, pero sería importante que España, un país tradicionalmente afectado por la hidatidosis, mantuviese vivas estas investigaciones", señala.