Alimentación Argentina Patagonia, Argentina, Mi茅rcoles, 05 de noviembre de 2008 a las 11:38

Un hongo que crece en la Patagonia produce componentes propios de los combustibles f贸siles

Los investigadores conf铆an en que el descubrimiento contribuir谩 eventualmente a reducir la dependencia del petr贸leo

EA/DICYT Investigadores de la Universidad del Estado de Montana (Estados Unidos) han descubierto que un hongo que se reproduce en los bosques de la Patagonia, en Argentina y Chile, genera un tipo de hidrocarburos volátiles, muy similares a los que pueden encontrarse en la gasolina y el diésel. Con este descubrimiento los científicos esperan darle un empuje a la producción de combustible a partir de hongos o mico-diésel, nombre con el que han bautizado los gases producidos por el microorganismo.

 

Los resultados del estudio, liderado por el investigador Gary Strobel, acaban de ser publicados en la edición de noviembre de la revista especializada Microbiology, que incluso ha ilustrado su portada con una fotografía del Gliocladium roseum, nombre científico del hongo.

 

Strobel, quien ejerce como profesor de fitopatología en la Universidad de Montana, empezó su tarea de lanzar este tipo de organismos a la fama cuando en 1997 encontró en las selvas de Honduras un hongo que libera antibióticos volátiles, y cuyas propiedades se encuentran en proceso de evaluación, dado su potencial para ser utilizado en la preservación de la fruta durante viajes transatlánticos.

 

De acuerdo con la información difundida por el centro académico, el investigador encontró el Gliocladium roseum durante una visita a la Patagonia en 2002. El hongo estaba incrustrado en las muestras de ramas de ulmo (Eucryphia cordifolia), una familia de árboles muy comunes en el centro de Chile y que también crecen en Argentina, que Strobel y su equipo habían recolectado.

 

Productor de gases

 

Una vez que los científicos extrajeron el hongo de las entrañas de las ramas y lo sometieron a ensayos, se dieron cuenta de que el organismo producía gases. Pruebas más intensas, en las que incluso se redujo la presencia de oxígeno, demostraron que estos gases eran los mismos que están asociados al combustible que se obtiene del petróleo crudo. Si bien el Gliocladium roseum no es el único organismo que ha mostrado ser capaz de producir hidrocarburos volátiles, sí es el primero conocido en producir al menos 55 de ellos, entre los que se incluyen octano, 2 metilo y hexadecano.

 

Los investigadores no pueden asegurar que el hongo sea capaz de generar suficiente cantidad de hidrocarburos como para llenar el tanque de diesel de un automóvil, pero señalan que a partir de este descubrimiento serán la genética y la biología sintética las encargadas de desarrollar los mecanismos para extraer todo el potencial energético del Gliocladium roseum, y de convertir sus gases en combustible líquido.

 

La clave está en los genes

 

"Es probable que el valor principal de este descubrimiento no sea el organismo en sí, sino los genes responsables de la producción de los gases", dice Gary Strobel, citado por la Universidad de Montana. "Hay ciertas enzimas que son responsables de la conversión de sustratos como la celulosa en mico-diésel".

 

De hecho, existe ya un grupo conformado por científicos de la Universidad de Montana y la Universidad de Yale que emprenderán el estudio genético del Gliocladium roseum, sin que por ello, dicen, deba descuidarse la búsqueda de otros organismos con las mismas características. Porque, aunque los investigadores reconocen que el descubrimiento de las propiedades productoras de este hongo de la Patagonia son excepcionales, no dudan de que en la abundante biodiversidad de los bosques sudamericanos, otros muchos microbios capaces de aportar soluciones a la dependencia del petróleo esperan a ser descubiertos.