Alimentación Ecuador , Manabí, Lunes, 14 de diciembre de 2009 a las 18:38

Tecnología para combatir una plaga del maíz en el Litoral ecuatoriano

Se trata de la “chicharrita”, el insecto transmisor del conjunto se síntomas conocidos como “cinta Roja”

CGP-INIAP/OEI-AECID/DICYT El Instituto Nacional Autónomo de Investigaciones Agropecuarias (Iniap) ha llevado a cabo un análisis del comportamiento del insecto conocido como “la chicharrita” del maíz, Dalbulus maidis, transmisor de los agentes causales del complejo de síntomas que los productores conocen como “cinta Roja”, presente en las plantaciones del maíz en el Litoral ecuatoriano. El trabajo de investigación se ha realizado en la Estación Experimental Portoviejo, donde los técnicos se han orientado a conocer la vida y el comportamiento de este insecto a fin de disponer de conocimientos para su manejo.

 

Asimismo, según la información proporcionada por el Iniap, se busca reducir los efectos negativos del uso indiscriminado de plaguicidas sobre el ambiente y la salud. Oswaldo Valarezo, técnico del Departamento de Protección Vegetal, asegura que esta plaga cuenta con enemigos naturales, las especies que se alimentan de ellos y reducen biológicamente sus poblaciones.

 

Tal es el caso de una pequeña avispa parasitoide identificada como Gonatopus bartietti que está reconocida como su principal regulador biológico en el mundo. En Manabí se ha establecido hasta el 23’68 por ciento de parasitismo.

 

Además, dice Valarezo, se complementa la acción de los parasitoides con la existencia de un gran número de depredadores que pueden alimentarse de esta “chicharrita”, como el chinche Zelus, las mariquitas Hippodamia convergens, y Cycloneda sanguinea, crisopas, avispas de los géneros Polybia y Polistes y arañas de la familia Salticidae; también se ve afectada esta plaga por la acción de hongos entomopatógenos como Verticillium, reportado en el cantón Bolívar de la provincia de Manabí.

 

Recomendaciones agronómicas

 

Por otro lado, han elaborado una serie de recomendaciones sobre prácticas agronómicas como el utilizar, para la siembra, el híbrido de maíz INIAP H-601 que ha demostrado tolerancia a los síntomas asociados a la enfermedad conocida como cinta roja y por tener buen potencial de rendimiento.

 

Solo en los casos en que existan altas poblaciones se está recomendando el uso de insecticidas como el thiametroxam+lambada-cyhalothrina o el lambada-cyhalothrina en dosis de un mililitro por litro de agua, realizando aspersiones al follaje. De esta forma se consigue un buen control sobre las chicharritas y otros insectos plagas del maíz. En la misma línea se recomienda aplicar planes adecuados de control de malezas, fertilización y de riego en zonas donde sea posible. Estas investigaciones fueron realizadas por los técnicos Oswaldo Valarezo, Ernesto Cañarte, Bernardo Navarrete, Miguel Intriago, con fondos de la Secretaría Nacional de Ciencia y Tecnología (Senacyt).