Alimentación España , León, Martes, 06 de abril de 2010 a las 12:36

La Universidad de Le贸n comienza la b煤squeda de protocolos 贸ptimos para criopreservar semen de peces

Una investigaci贸n con peces cebra y doradas pretende aplicar t茅cnicas novedosas de Biolog铆a molecular que han obtenido ya avances en mam铆feros

Antonio Martín/DICYT La conservación a bajas temperaturas del semen es una herramienta de gran valor para acuicultura y la investigación científica. Este proceso, denominado criopreservación, permite crear bancos de recursos genéticos de especies que pueden ser comercializadas o se pretenden conservar por su interés biológico. Sin embargo, no se han conseguido aún protocolos óptimos de crioconservación en diferentes especies de peces, como, por ejemplo, de la infraclase de los teleósteos, en el que se agrupa la mayoría de los peces comunes. La Universidad de León, a través de un proyecto de investigación financiado por la Fundación Ramón Areces, ha iniciado recientemente la búsqueda de protocolos óptimos para conservar el semen de dos especies, una de interés comercial, la dorada, y otra de interés científico, el pez cebra.

 

La investigación consta de "tres objetivos fundamentales", según explica a DiCYT Vanesa Robles, investigadora Ramón y Cajal que coordina el trabajo científico. En primer lugar, se realizará "un diagnóstico molecular de la calidad espermática de machos". Para este trabajo, se pretende incorporar "nuevas técnicas de Biología molecular". A través del análisis de la expresión génica, se podrá realizar un diagnóstico molecular de la calidad espermática de estos machos reproductores. El proyecto, por tanto, buscará establecer una correlación entre la expresión y parámetros asociados a la calidad del esperma, como la motilidad y la viabilidad.

 

En segundo término, los investigadores, que pertenecen al Departamento de Biología Molecular, realizarán un análisis de los daños genéticos en células de la línea germinal tras la criopreservación. El proceso de congelación puede ocasionar daños en el ADN de las células implicadas en el desarrollo del embrión. También aquí se emplearán nuevas técnicas de Biología molecular. Una tercera fase de la investigación es el estudio epigenético de las muestras tras la criopreservación. En conjunto, "el trabajo representa un salto cualitativo en este campo de la investigación, al emplear avances sobre expresión génica en mamíferos", explica Robles.

 

Técnicas

 

Para analizar la calidad seminal de los peces y valorar los daños que se producen en la etapa de criopreservación, se incorporarán nuevas técnicas de Biología molecular. En concreto, se empleará el PCR a tiempo real, "novedosa con este enfoque, para la valoración de los daños genéticos en teleósteos". El PCR (reacción en cadena de la polimerasa, por sus siglas en inglés) a tiempo real ya se emplea en otros ámbitos, como por ejemplo en marcadores de pluripotencia. Por su parte, en el estudio epigenético se analizará la metilación de los promotores. "El promotor desencadena que se exprese un gen, y en él existen zonas modificables genéticamente", indica la experta. Para la evaluación de la motilidad de los espermatozoides (esto es, las trayectorias que toman, si son curvilíneas o rectas, por ejemplo), se empleará un sistema CASA propio de la Universidad de León.

 

Las investigaciones se realizarán con dos especies de teleósteos, la dorada (Sparus aurata) y el pez cebra (Danio rerio). En el primer caso, la criopreservación de semen se ve afectada por radicales libres que ocasionan daños a su ADN. En esta especie, interesante por su valor gastronómico, se pretende conocer el protocolo de criopreservación idóneo que permita una mayor productividad en acuicultura. En el caso del pez cebra, animal de laboratorio, ya existe un protocolo de criopreservación desarrollado, que "se puede mejorar". Esta especie produce poco semen, lo que dificulta su reproducción asistida.

 

En el primer caso, los investigadores pretenden determinar "qué machos reproductores son más idóneos para la conservación de su esperma". En el segundo, si se logra conservar el semen de una manera óptima, "puede ser muy útil para la investigación científica", puesto que el pez cebra tiene un gran interés biológico al ser un organismo modelo en el que se han desarrollado múltiples líneas de investigación. En todo caso, el conocimiento se que pueda generar puede ser "extrapolable a especies de teleósteos en peligro de extinción con la adaptación de sus respectivos protocolos".

 

Formación de un nuevo grupo investigador
 
A través de la concesión de este proyecto de investigación por parte de la Fundación Ramón Areces y con la financiación de otro proyecto por parte del Ministerio de Ciencia e Innovación (Mincinn), Vanesa Robles podrá crear un nuevo grupo investigador en el seno del Departamento de Biología Molecular. Junto a la científica, doctora en Biología, ya colaboran una doctoranda y dos técnicos, y espera la incorporación de otro investigador posdoctoral Juan de la Cierva. Este grupo además establece sinergias con otros investigadores de la institución académica que poseen proyectos paralelos, como los de los profesores Felipe Martínez Pastor y Paz Herráez. La Fundación Ramón Areces proporciona unos 85.000 euros para los tres años en los que se desarrollará la investigación. El Mincinn, por su parte, aportará a la investigación de cultivo, caracterización y criopreservación de células primordiales germinales y células madre precursoras en peces, unos 133.000 euros. La investigación financiada por la Ramón Areces comenzó en marzo.