Alimentación Argentina , Argentina, Lunes, 19 de abril de 2010 a las 18:08

Estudian al escarabajo estercolero, un indicador de biodiversidad

La influencia ejercida por los cambios ambientales y las fragmentaciones del h谩bitat pueden detectarse a partir de monitoreos de distintos organismos

INFOUNIVERSIDADES/DICYT Investigadores de la Facultad de Ciencias Exactas, Naturales y Agrimensura aportan al desarrollo y ampliación de la conservación de ambientes nativos. Para ello, efectúan inventarios de la entomofauna en algunas zonas agrícola-ganaderas del Chaco, ya que algunos insectos como el escarabajo estercolero son indicadores de la biodiversidad que persiste en pequeñas porciones de bosques aún no destruidas por el hombre y su producción.


Con este objetivo realizan hace tiempo muestreos en el Chaco y otras provincias. Miryam Damborsky, de la cátedra de Biología de Artrópodos, brindó algunas precisiones sobre el trabajo realizado en un establecimiento ganadero del interior del Chaco.

 

Los bosques y selvas argentinas son los ambientes que contienen la mayor variedad de especies vegetales y animales autóctonas. Sin embargo, de acuerdo al Inventario Forestal Nacional (2001) la masa forestal nativa sólo alcanza al 12,8% de su distribución original. Las actividades antrópicas provocan la disminución de la diversidad biológica en numerosas ecoregiones de Argentina, entre las más afectadas se encuentran los pastizales pampeanos, el monte del Espinal, los bosques y sabanas del Chaco, las yungas y la selva misionera.

 

La influencia ejercida por los cambios ambientales y las fragmentaciones del hábitat pueden detectarse a partir de monitoreos de distintos organismos que funcionan como indicadores ambientales. Los mamíferos, aves, plantas con flores y entre los insectos, las mariposas, son indicadores de biodiversidad. Los invertebrados fueron durante mucho tiempo ignorados en programas de manejo y conservación ambiental. Sin embargo, una conservación significativa no puede llevarse a cabo si no se conocen todas las especies involucradas en el funcionamiento del ecosistema. Los planes de manejo que tienden a la conservación de la fauna sólo pueden implementarse una vez que los inventarios sean completados.

 

Los escarabajos estercoleros (Scarabaeidae: Scarabaeinae) son uno de los grupos más utilizados en estudios de biodiversidad, debido a su abundancia en la región tropical y su vulnerabilidad a la destrucción del hábitat. Tienen estrecha relación con los mamíferos silvestres y domésticos, porque numerosas especies dependen de sus excrementos para su alimentación y nidificación. De esta manera, promueven el reingreso de materia orgánica en el ciclo de nutrientes y aumentan la aireación del suelo. Muchas especies son utilizadas en programas integrados de control biológico de helmintos gastrointestinales y de la mosca de los cuernos, que desarrollan parte de su ciclo en el excremento del ganado.

 

La transformación de ecosistemas naturales en ambientes destinados a las prácticas agrícola-ganaderas tiene profundos impactos ecológicos. Aunque estos paisajes transformados tienen poco valor de conservación, hay indicios de que una proporción de la biodiversidad original persiste si se preservan fragmentos de bosque. El registro de la diversidad y abundancia de algunos taxones benéficos, entre ellos las Scarabaeidae o escarabajos -explica Damborsky- contribuye al conocimiento del estado de conservación de un ambiente y genera la posibilidad de ampliar la implementación de políticas educativas de conservación.

 

En el trabajo efectuado por las licenciadas Damborsky y Alvarez Bohle, se examinó la composición, riqueza y estructura trófica de la comunidad de escarabajos estercoleros en dos pastizales y en un remanente de bosque, en un establecimiento ganadero ubicado en la provincia del Chaco. La comunidad de insectos se caracterizó de acuerdo a la abundancia y número de especies. Se comparó la estructura trófica teniendo en cuenta la cantidad de especies colectada.

 

Gromphas lacordairei fue muy abundante en los pastizales, ésta es una especie frecuente en áreas destinadas a pasturas en el Norte y Centro de Argentina. En el bosque se verificó la mayor abundancia y riqueza: catorce especies fueron exclusivas de este ambiente. Entre ellas Canthon lituratus, Eurysternus caribaeus y E. hirtellus fueron algunas de las más numerosas. Para la licenciada Damborsky “los resultados muestran una disminución en la composición y abundancia de escarabajos del fragmento de bosque a los pastizales. Se nota una baja proporción de especies con hábitos generalistas y escasez de rodadores, lo que caracteriza a ambientes con algún grado de modificación”. Sin embargo, se destaca el valor de estos pequeños fragmentos de bosque en las áreas agrícola-ganaderas de la provincia del Chaco, y debería ser prioritaria su conservación ya que preservan en forma eficaz una alta proporción del grupo estudiado.