Salud España , Valladolid, Lunes, 29 de noviembre de 2004 a las 19:47

Más de 100 profesionales participarán desde el miércoles en el XXIV Curso de Glaucoma

Durante tres días actualizarán conocimientos sobre una enfermedad que genera entre el 6 y el 21% de los casos de ceguera

BGA/DICYT El próximo miércoles comienza en Valladolid el XXIV Curso de Glaucoma organizado por el Instituto Universitario de Oftalmobiología Aplicada (IOBA), al que asistirán un centenar de oftalmólogos y residentes de Oftalmología con la finalidad de actualizar sus conocimientos en una enfermedad cuya detección precoz es especialmente importante, ya que los daños que ocasiona son irreversibles.

El curso, dirigido por el profesor José Andrés Maquet y el doctor Alfonso Antón, será impartido por 15 profesionales de ámbito nacional e internacional que revisarán los avances en técnicas de diagnóstico, así como en los tratamientos médico-quirúrgicos. La finalidad de contrastar los conocimientos que se tienen sobre la enfermedad con la práctica diaria, de modo que se puedan adoptar actuaciones y decisiones en cada uno de los diferentes tipos de glaucoma.

Además, contarán con la presencia del profesor Franz Grehn, de la Universidad de Wuerzburg, quien recibirá el premio Sánchez Salorio en reconocimiento a su labor científica y clínica en el campo del glaucoma.

La gravedad del glaucoma

Existen varios tipos de glaucoma, el más importante es el glaucoma primario de ángulo abierto: una neuropatía óptica frecuente, ya que afecta al 2,1% de la población mayor de 40 años, según un estudio de prevalencia realizado en Segovia por el doctor Alfonso Antón en 2001 y cuyos datos no han sido aún publicados. Se trata de una enfermedad asintomática para el paciente hasta que llega a estadios avanzados, y los medios terapéuticos disponibles actualmente sólo permiten retrasar o detener su evolución, y se caracteriza por una pérdida progresiva del campo visual que puede llegar a provocar una ceguera irreversible.

 

Por todas estas razones, el glaucoma es una de las primeras causas de ceguera en la sociedad industrializada (es la responsable directa de entre el 6 y el 21 % de las causas de ceguera), más de la mitad de los casos no se encuentran diagnosticados, y su mejor tratamiento es el diagnóstico precoz. La Organización Mundial de la Salud recomienda en sus programas de prevención de la ceguera la toma de medidas específicas para el diagnóstico precoz de esta enfermedad. En la mayoría de los casos, el glaucoma no tiene síntomas de manera que el paciente puede ir perdiendo la visión sin darse cuenta.

Respecto a su curación, hoy no existe un tratamiento que elimine definitivamente la enfermedad, pero sí existen distintas medidas como fármacos, láser, y cirugía que ayudan a detener o retrasar su evolución y conservar la visión y la calidad de vida de los pacientes