Tecnología España , Salamanca, Martes, 30 de octubre de 2012 a las 15:17

Las sorprendentes aplicaciones industriales de las arcillas

La Universidad de Salamanca inicia un nuevo proyecto de investigación sobre las características nanométricas de las arcillas, que se utilizan en campos tan diversos como la Medicina, la cosmética y circuitos de velocidad

José Pichel Andrés/DICYT La Universidad de Salamanca está iniciando un nuevo proyecto que ampliará su línea de investigación sobre arcillas y sus aplicaciones. Hasta el momento, un grupo del Departamento de Geología ha estudiado dos arcillas, conocidas como sepiolita y paligorskita, pero gracias al tercer proyecto nacional que recibe dentro de este campo de estudio se dispone a comenzar un nuevo trabajo sobre esmectitas magnésicas. Estas investigaciones tienen una gran relevancia económica porque las arcillas tienen diversos usos industriales, son muy diferentes unas de otras y España tiene importantes yacimientos.

 

En el mundo, hay varios miles de minerales conocidos y cada uno de ellos tiene las mismas características en todo el planeta. Por ejemplo, todo el cuarzo del mundo es básicamente igual. Sin embargo, esto no ocurre con las arcillas, que en apariencia son similares, pero que bajo el microscopio tienen características muy distintas. "Su estructura nanométrica revela propiedades absolutamente diferentes", afirma en declaraciones a DiCYT Mercedes Suárez, directora del Departamento de Geología.

 

Un solo gramo de una arcilla puede abarcar una superficie de muchos cientos de metros cuadrados. De hecho, en algunos casos la misma cantidad del mismo mineral se despliega en una superficie de seis metros cuadrados o de 400, según el yacimiento del que proceda. De la misma forma, "uno absorbe el 15% de su peso y otro el 200%, como si fuera una esponja". Entender cómo es posible que se produzcan estas variaciones y cuáles son las mejores aplicaciones en cada caso fundamenta la línea de investigación del Departamento de Geología desde hace tiempo.

 

Circuitos de velocidad

 

Estas radicales variaciones en arcillas que a simple vista son casi iguales revelan que en realidad tienen una estructura nanométrica muy diferente. Por ejemplo, el grupo de investigación de Mercedes Suárez estudia desde hace años la sepiolita, que está compuesta por fibras y tiene muchos poros, de manera que en su interior tiene mucho aire y puede alojar moléculas de otros materiales. Por eso se utiliza, por ejemplo, en los circuitos de alta velocidad para absorber las grasas de los motores.

 

La sepiolita es un "mineral español", puesto que "tenemos el mayor yacimiento del mundo" y tiene aplicaciones sorprendentes en campos diversos como la Medicina, la Farmacia y la cosmética, explica la geóloga. Sin embargo, el proyecto de investigación que ahora comienza estudiará también las esmectitas magnésicas, que se encuentran sobre todo en grandes yacimientos en la Cuenca del Tajo y que tienen unas propiedades excelentes para procesos químicos que se emplean en algunas industrias.

 

Colaboraciones internacionales

 

Además, el nuevo proyecto hace posibles nuevas colaboraciones internacionales, en este caso, con científicos de Atenas (Grecia) y Belgrado (Serbia), donde también se realizan importantes investigaciones en este campo debido a las peculiares características que presentan las arcillas de estos lugares. "Queremos conocer las razones por las que el mismo mineral presenta características tan variadas y esto sólo es posible haciendo estadísticas sobre yacimientos muy distintos. Por ejemplo, las sepiolitas serbias son radicalmente distintas y lo mismo ocurre con las palygorskitas griegas", comenta la investigadora.

 

El proyecto cuenta con "las dos mayores empresas que trabajan internacionalmente en el sector de las arcillas industriales", que aportan muestras. Además de la Universidad de Salamanca, con Mercedes Suárez y Juan Gómez Barreiro como colaborador, también participan Emilia García Romero, de la Universidad Complutense de Madrid, y Manuel Sánchez del Río, del European Synchrotron Radiation de Grenoble (Francia).