Salud Perú , Perú, Miércoles, 20 de noviembre de 2013 a las 09:03

El ruido podría generar problemas cardíacos

El profesor de la sección Física de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), Richard Moscoso, nos explica sobre las consecuencias del ruido.

PUCP/DICYT Las ciudades crecen, cada vez hay más carros, más construcciones, las personas viven más cerca de los aeropuertos, etc. Esto ha hecho que aumente la contaminación sonora en todo el mundo, es por esta razón que la OMS la considera el segundo problema ambiental de Europa. El Perú no está lejos de eso.


En primer lugar, se tiene que aclarar que el ruido es subjetivo, esto es porque al escuchar música a alto volumen para uno no es problema pero puede ser fastidioso para el vecino. Sin embargo, hay diferentes tipos de ruido que se puede determinar por la duración, la intensidad y el contenido de frecuencias. Dentro del tipo impulsivo, en el que podemos encontrar la maquinaria que mantiene una secuencia de golpes incluyendo los martillos o taladros, son de corta duración pero de gran intensidad. Entre la diferentes frecuencias, encontramos ruidos como el de un ventilador o una caída de agua, que son de un ancho de banda amplio, pero el claxon de un carro tiene un ancho de banda más corto.


Es cierto, que hay casos en los cuales se usa el ruido para disimular otros, por ejemplo, el sonido de una caída de agua para muchos no sería molesto, por eso es utilizado para enmascarar el ruido del tráfico o el de una construcción. Sin embargo, el profesor Moscoso explica que al enmascarar otros ruidos lo que se está haciendo es aumentar el nivel de sonidos que se perciben y a la larga, esto puede afectar la salud.


Peligros a la salud


Entre los efectos más comunes se tiene desde la pérdida parcial de audición hasta la sordera permanente, si la persona se encuentra sometido mucho tiempo a un nivel de ruido alto. Pero en nuevos estudios que está realizando la Unión Europea, se han encontrado que esos no serían los únicos problemas. Se descubrió que también podría conllevar a un riesgo cardiaco. Esto se vio en las personas que viven cerca de los aeropuertos y que habrían sufrido ataques cardiacos por estar sometidos a mucho ruido por un tiempo prolongado.


Históricamente se ha estudiado a personas que han trabajado con máquinas muy ruidosas lo que ha ayudado a generar criterios de ISO u OSHA (agencias encargadas de fijar normas de seguridad y salud en el lugar de trabajo) para ver el riesgo. El profesor Moscoso explica que ha actualmente se tiene como un límite permisible los 70 decibeles, pero es probable que en unos años este nivel se revise y baje.


Por otro lado, los efectos que puede tener al generar disturbios en el sueño son varios, desde problemas fisiológicos, de concentración, de productividad en el trabajo, etc. “Hace 10 años no se hablaba de esto, pero en Europa ya se está dando una revisión de las normas porque no se habían tomado en cuenta este tipo de daño”, explica el profesor Moscoso.


Más normas y educación


Hay algunas municipalidades en Lima que han empezado a realizar campañas para que se disminuya el ruido proveniente del tráfico. Sin embargo, el problema está más vinculado a la educación. El profesor Moscoso explica que Europa ha tratado de solucionar los problemas del ruido y han calculado que eso les costaría entre el 2 y 3% del PBI.


El desconocimiento de algunas personas hace que no le den la verdadera importancia a este problema. Es necesario que se hagan estudios en los que se puedan detectar las zonas donde hay niveles excesivos de ruidos, sin embargo, estos estudios son costosos. Es importante que las personas que viven al costado de fábricas, en avenidas principales, etc. tengan presente que si bien ellos no tienen problemas de audición ahora, en 20 o 30 años estos se podrían presentar.


“Las personas simplemente no saben que si el trabajador no se pone auriculares se quedará sordo o que el conductor de un micro que está al costado de la compresora, a la larga tendrá problemas de audición”, menciona el profesor Moscoso, ya que la información es más importante para que la gente tome conciencia, “si no parte de la persona el hecho de que no debería tocar el claxon cerca a un hospital, por ejemplo, una multa no va a controlar el problema”, agrega.