Alimentación Costa Rica , Heredia, Viernes, 17 de enero de 2014 a las 09:25

Diseñarán mapas de evacuación en caso de tsunami

Permitirán trazar las rutas de evacuación en algunas localidades de la costa pacífica

UNA/DICYT Determinar las rutas de evacuación en caso de presentarse un tsunami en el Pacífico de Costa Rica, forma parte de un proyecto interinstitucional que pretende diseñar mapas de riesgo costero, iniciativa en que participara el Proyecto Red de Observación del Nivel de Mar de Costa Rica de la Universidad Nacional (RONMAC-UNA) con el apoyo financiero de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE).

 

Silvia Chacón, oceanógrafa de la Universidad Nacional y una de las encargadas de la elaboración de los mapas, comentó que la idea primordial es mapear todas las costas del país en etapas, con el fin de que nacionales y extranjeros estén debidamente informados de las rutas de evacuación a considerar en caso de presentarse un tsunami.

 

Aunque el proyecto está en trámite y a las puertas de aprobación por parte del Comité Asesor Técnico Marino Costero (CAT-Marino) de la CNE, la primera etapa arrancará a inicios del 2014 con el mapeo comprendido entre la frontera con Nicaragua hasta Cabo Blanco, debido a la extensión de la costa, lo cual tomará unos tres años.

 

Cabe destacar que en la actualidad la UNA forma parte del CAT-Marino Costero de la CNE, creado en el 2010, donde asesora con todo lo relacionado en materia de tsunamis y otros fenómenos marino costeros.

 

Evacuación


Para trazar las rutas de evacuación y determinar los sitios seguros ante un tsumani, se realizarán simulaciones por computadora del arribo de diferentes de estos fenómenos a nuestras costas.

 

Chacón detalló que Costa Rica no tiene el potencial de generar un tsunami destructivo local en sus propias costas, como lo tienen Chile, Japón y Perú.

 

National Geographic define al tsunami como una serie de olas procedentes del océano que envía grandes oleadas de agua que, en ocasiones, alcanzan alturas de 30,5 metros hacia el interior, que pueden causar una destrucción generalizada cuando golpean la costa. Aproximadamente un 80% de estos eventos se producen en el en el Cinturón de Fuego del océano Pacífico, área geológicamente activa donde los movimientos tectónicos hacen que los volcanes y terremotos sean habituales.

 

“En nuestro país los terremotos no llegan a ser tan grandes como por en Japón o en Chile. Lo que sucede en la zona de subducción a la hora de presentarse un gran sismo, es que una parte del suelo marino se levanta y otra se hunde, originando el tsunami. En Nicoya y Osa la parte del suelo marino que se levanta son las penínsulas mientras que los golfos se hunden, por lo que el impacto en el lecho marino es pequeño”, recalcó la investigadora.

 

Chacón puntualizó que si bien el estudio definirá los lugares de la costa pacífica más vulnerables al embate de un tsunami, en este momento el sitio de mayor riesgo está en la Isla del Coco, debido a que se encuentra en punto geográfico donde puede recibir un impacto por distintas direcciones y en donde sus pobladores no tendrían forma de enterarse.

 

Protocolos

 

Dados los eventos acaecidos, en especial el maremoto de Sumatra en el 2004, Silvia Chacón asumió en 2007 la tarea de diseñar los protocolos de tsunami para la CNE, diferenciados para el Pacífico, el Caribe y la Isla del Coco, los cuales en la actualidad se encuentran en un periodo de actualización y evaluación por parte del CAT-Marino Costero.

 

“La idea de reactivar estos protocolos es que personal del centro de operaciones de la CNE retome la iniciativa de avisar vía telefónica a los especialistas al momento de activarse una alerta y así no depender de un mensaje de texto, que según la hora que ocurra podría no ser revisado”, aseveró Chacón.

 

Sobre el protocolo exclusivo para la Isla del Coco, la oceanógrafa explicó que su diseño obedeció a ciertas características presentes en la zona, como por ejemplo la limitación de la señal de radio, la cual se convierte en un obstáculo a la hora de rescatar turistas y dar aviso a las lanchas patrulleras, acciones que hacen la diferencia en el resguardo de vidas humanas en momentos de desastre natural.
Red de alerta

 

Silvia Chacón, investigadora en Tsunamis del IOI-UNA, es máster en Oceanografía Física del Centro de Investigación Científica y Educación Superior de Enseñanza (CICESE), México, y futura doctora en Geociencias Costeras de la Universidad de Kiel, Alemania.

 

Ella participa de la recientemente creada Red de Investigadores en Tsunamis de Latinoamérica y el Caribe (RITLAC), la cual actuaría de forma complementaria al Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico (PTWC por sus siglas en inglés).

 

Esta red, integrada por 22 científicos de 13 países de Latinoamérica y el Caribe, surgió como iniciativa de Chacón en el marco de un taller de sismicidad y vulcanismo en ciudad Panamá, al identificar un grupo de investigadores interesados en el estudio de los tsunamis que participaban en el encuentro.

 

Uno de los objetivos de RITLAC es poder intercambiar información entre los investigadores, así como alertar al resto del equipo cuando se presente una eventualidad en algunas de las costas latinoamericanas o del Caribe.