Ciencia Argentina , Santa Cruz, Jueves, 04 de septiembre de 2014 a las 18:20

El dinosaurio gigante más completo jamás descubierto

El hallazgo de una nueva especie en la Patagonia, ‘Dreadnoughtus schrani’, tiene un valor excepcional porque el esqueleto está muy completo y permitirá entender mejor la anatomía y la biomecánica de los grandes saurópodos

José Pichel Andrés/DICYT Medía 26 metros de largo y pesaba 60 toneladas, era herbívoro y habitaba hace unos 77 millones de años en los bosques de la actual provincia de Santa Cruz, en la Patagonia argentina. Los científicos de la Universidad de Drexel, en Estados Unidos, junto a científicos argentinos, desenterraron a lo largo de cuatro campañas de excavación su gigantesco esqueleto, excepcionalmente bien conservado, y debido a su increíble tamaño lo llamaron Dreadnoughtus, que significa “no teme a nada”. La revista Scientific Reports, del grupo Nature, recoge ahora la descripción de un ejemplar de la familia de los titanosaurios que servirá para entender mejor la anatomía y la biomecánica de los animales más grandes que caminaron sobre la Tierra.

 

“Se trata del dinosaurio gigante más completo descubierto hasta ahora. Dreadnoughtus no es el más grande de todos, pero sí el más completo entre los gigantes”, explica a DiCYT Fernando Novas, jefe del Laboratorio de Anatomía Comparada del Museo Argentino de Ciencias Naturales “Bernardino Rivadavia” e Investigador Principal del CONICET, que ha formado parte de esta investigación. Según afirma, el hallazgo es especialmente valioso porque incluye más del 70% de los huesos, mientras que el resto de los dinosaurios gigantes se conocen a partir de restos muy fragmentados.

 

Con este material, los científicos afirman que este saurópodo es el animal terrestre más grande del que se puede realizar un cálculo preciso acerca de su masa corporal. En los cuadrúpedos, la clave está en las mediciones de las extremidades, particularmente, el fémur y el húmero y este hallazgo incluye estos dos huesos, de manera que los investigadores pueden realizar una estimación de su peso muy precisa. Además, la colección de fósiles incluye piezas asombrosas, como una vértebra de más de un metro de diámetro.

 

El resultado de los cálculos indica que tanto como una docena de elefantes africanos o como siete Tyrannosaurus rex a pesar de que cuando murió aún no estaba completamente desarrollado, según Kenneth Lacovara, investigador estadounidense que lideró los trabajos de excavación y los estudios posteriores del Dreadnoughtus schrani, nombre completo en honor de Adam Schran, empresario estadounidense que apoyó la investigación.

 

Todo ello fue desenterrado entre 2005 y 2009 y analizado en años posteriores por un equipo que también incluyó al investigador argentino Lucio Manuel Ibiricu, del Centro Nacional Patagónico en Chubut; a Matthew Lamanna, del Museo Carnegie de Historia Natural; y a Jason Poole, de la Academia de Ciencias Naturales de la Universidad de Drexel, además de numerosos alumnos y ex alumnos de la universidad norteamericana y otros colaboradores. Junto a este gran ejemplar, fue descubierto otro más pequeño y con un esqueleto menos completo.

 

Por lo tanto, el Dreadnoughtus está representado por más de un centenar de huesos pertenecientes a dos individuos diferentes. Esto aumenta el conocimiento de la anatomía de estos animales, de modo que puede saberse cómo eran sus vértebras, la forma de sus patas y de las caderas. “Esto ayuda al paleontólogo a clarificar las relaciones de parentesco entre los titanosaurios, así como generar hipótesis referentes a las adaptaciones que desarrollaron para soportar el peso corporal, permitirles caminar, y erguirse sobre sus patas traseras para alcanzar las copas de los árboles”, apunta Fernando Novas.

 

¿Por qué crecieron tanto?


“Para nosotros el principal interrogante que se genera con estos hallazgos tan recurrentes en la Patagonia, es por qué crecieron tanto los dinosaurios. Nadie tiene hoy una respuesta a este enigma, pendiente desde que los primeros dinosaurios fueron descriptos por vez primera en 1824”, asegura Fernando Novas, que es uno de los paleontólogos más reconocidos de Argentina, responsable del hallazgo de varias especies de dinosaurio de la Patagonia, como diversos dinosaurios que bautizó con los nombres de Talenkauen, Orkoraptor y Puertasaurus y también decisivo esta vez: “Kenneth nos manifestó su interés en realizar exploraciones en la zona y así fue como nos asociamos para conducir un estudio científico del Dreadnoughthus”.

 

“Nuestro aporte ha sido el de brindar datos sobre la anatomía de otros dinosaurios gigantes que nosotros mismos habíamos descubierto y estudiado, así como intercambiar ideas e interpretaciones del nuevo descubrimiento”, comenta el investigador de CONICET.


Enterramiento profundo

 

Los investigadores creen que murieron por alguna causa natural o un desastre ambiental y quedaron enterrados en sedimentos de forma muy rápida, aunque probablemente otros dinosaurios carroñeros se acercaron a aprovecharse de sus restos, puesto que se han encontrados dientes de terópodos. Probablemente, una gran inundación provocó que el terreno fuera inestable y el entierro de los dos ejemplares fue rápido y profundo, lo cual explicaría la extraordinaria integridad del esqueleto.

 

El grupo de los titanosaurios es muy variado e incluye especies que apenas tienen el tamaño de una vaca y otros enormes, pero de estos últimos se tiene muy poca información. Por ejemplo, Argentinosaurus es una especie comparable a la de este hallazgo y probablemente mayor, pero no hay ningún método fiable para calcular su masa, ya que todas las piezas que se han encontrado están muy fragmentadas.

 

En Argentina y en 3D para todo el mundo

 

La ley argentina indica que los fósiles son propiedad del Gobierno y deben permanecer en la provincia en la que fueron encontrados. Aunque actualmente se encuentran en la Universidad de Drexel para su estudio, serán devueltos en depósito permanente en el Museo Padre Molina, en la ciudad de Río Gallegos en 2015.

 

Sin embargo, estarán a disposición de los investigadores de una forma muy distinta, ya que el equipo de Lacovara ha escaneado digitalmente cada pieza y ha realizado una reconstrucción digital en 3D que estará a disposición de los expertos y del público en general. “La fidelidad es perfecta y los huesos no se descomponen con el tiempo, así que el modelado digital es el futuro, sobre todo para el estudio de los dinosaurios gigantes”, asegura. Además, gracias a esta tecnología se puede comprender mucho mejor la estructura y las funciones de las diferentes partes de la anatomía del saurópodo.

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Referencia bibliográfica 

 

Kenneth J. Lacovara, Matthew C. Lamanna, Lucio M. Ibiricu, Jason C. Poole, Elena R. Schroeter, Paul V. Ullmann, Kristyn K. Voegele, Zachary M. Boles, Aja M. Carter, Emma K. Fowler, Victoria M. Egerton, Alison E. Moyer, Christopher L. Coughenour, Jason P. Schein, Jerald D. Harris, Rubén D. Martínez & Fernando E. Novas. A Gigantic, Exceptionally CompleteTitanosaurian Sauropod Dinosaur fromSouthern Patagonia, Argentina. Scientific Reports, 2014. DOI: 10.1038/srep06196