Alimentación Colombia , Bogotá D.C., Miércoles, 01 de octubre de 2014 a las 10:21

Elaboran un gel de plasma sanguíneo que ayuda a regenerar heridas y quemaduras

Se busca que los fibroblastos puedan integrarse con la sustancia elaborada a partir de plasma sanguíneo, para que las células fabriquen colágeno

UN/DICYT Un gel de plasma sanguíneo, elaborado por investigadores de la Universidad Nacional (UN) de Colombia, podría ayudar a cicatrizar heridas de corte profundo y llagas causadas por permanecer mucho tiempo acostado o en silla de ruedas. Rubén Darío Godoy, docente del Departamento de Ingeniería Química de la UN, explica que el propósito de dicho trabajo es que, desde el punto de vista estético, haya una cicatrización suave y que el proceso no tarde demasiado.

 

“Teniendo en cuenta que una quemadura puede durar seis meses en recuperarse, el propósito de este método es reducir ese tiempo a dos meses”, afirma el investigador.

 

Asimismo explica que las quemaduras graves, las heridas de corte profundo o las llagas causadas por permanecer muchas horas en silla de ruedas o acostados pueden regenerarse, pero cuando la piel se rehabilita no se llenan los orificios, sino que se moldean.

 

Lo ideal es que puedan rellenarse con un biomaterial que ayude a restablecer la herida, desde la superficie hasta la parte interior. Este es, precisamente, el objetivo central del trabajo que se está desarrollando en la U.N., en el cual se utiliza como materia prima el plasma sanguíneo.

 

“Si al quemarse se genera un orificio profundo en la piel y se deja sanar sin medicamentos o tratamientos, las células del tejido conectivo en la dermis van cubriendo la herida, pero dejan el molde. Por eso es necesario rellenar la zona con un biomaterial”, asegura el profesor Godoy, líder del proyecto.

 

La idea es que el biomaterial no sea simplemente una cubierta para disimular. Se busca que los fibroblastos puedan integrarse con la sustancia elaborada a partir de plasma sanguíneo, para que las células fabriquen colágeno. Este último es remplazado por la fibrina (un polímero en estado sólido proveniente del fibrinógeno), la cual se biodegrada, se convierte en residuo y termina con la rehabilitación de la piel.

 

El gel del plasma

 

Del plasma y de su proteína (el fibrinógeno) resulta el gel que se pondrá en las heridas. Este puede enfriarse a cuatro grados centígrados (crioconcentración), para luego, a 37 grados, agregarle calcio, importante para insolubilizar el material y formar un gel compacto.

 

“Al calcio a 37 grados se le añade alginato, un polímero a base de algas y bacterias, con el cual se forma una sustancia fácil de manipular”, señala el experto.

 

El biomaterial, por lo menos en la crioconcentración, tarda en formarse entre 10 y 15 minutos, mientras que con el alginato lo hace de inmediato.

 

Con el gel formado, es necesario verter células que se adhieran al plasma, produzcan colágeno y ayuden a los fibroblastos a pegarse a la cubierta de la piel; sin ellas la regeneración sería lenta.

 

En este momento han llegado a comprobar, a través de pruebas in vitro, que efectivamente el plasma ayuda a cicatrizar. Ahora buscan que las células se reproduzcan más y extender su tiempo de vida, ya que se ha detectado que crecen hasta el tercer día y luego se van muriendo.