Espacio Chile , Chile, Viernes, 20 de enero de 2017 a las 10:51

Astrónomos observan la agitada adolescencia de galaxias similares a la Vía Láctea

Los nuevos datos obtenidos con ALMA indican que la mayor parte de la masa de estas galaxias está formada por el frío gas molecular más que por las estrellas

OBSERVATORIO ALMA/DICYT Las galaxias espirales como nuestra Vía Láctea no siempre fueron remolinos bien formados como los que vemos en el Universo hoy. Los astrónomos creen que hace unos 8 a 10 mil millones de años, los progenitores de la Vía Láctea y demás galaxias espirales similares eran estructuras más pequeñas y menos organizadas, pero increíblemente ricas en material que sirve de alimento para las estrellas en formación. Tanto así, que probablemente hayan sido verdaderas fábricas que producían estrellas más rápido que en cualquier otro período del Universo.

 

Ahora, gracias al Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA), los astrónomos encontraron indicios que respaldan su teoría. Tras estudiar cuatro jóvenes galaxias similares a la Vía Láctea observándolas como eran hace unos 9.000 millones de años, descubrieron que todas eran extraordinariamente ricas en gas de monóxido de carbono, un material conocido por propiciar la formación de estrellas.

 

“Usamos ALMA para detectar versiones adolescentes de la Vía Láctea y descubrimos que efectivamente tienen cantidades mucho mayores de gas molecular, que alimentarían un rápido proceso de formación estelar”, explica Casey Papovich, astrónomo de la Texas A&M University, en College Station, y autor principal de un artículo publicado en la revista Nature Astronomy. “Estas galaxias las comparo con un adolescente que consume grandes cantidades de alimento para poder crecer”.

 

 

Pese a la extrema abundancia de gas que alimenta los procesos de formación estelar, estas galaxias aún no están del todo formadas, y son relativamente pequeñas en comparación con la Vía Láctea tal como la vemos hoy. Los nuevos datos obtenidos con ALMA indican que la mayor parte de la masa de estas galaxias está formada por el frío gas molecular más que por las estrellas. Según los astrónomos, estas observaciones ayudan a entender a cabalidad cómo evolucionó la materia en las galaxias de tamaño similar al de la Vía Láctea y cómo se formó nuestra propia galaxia.