Salud España Salamanca, Salamanca, Martes, 02 de diciembre de 2003 a las 20:00
Entrevista a Paul Nurse, Nobel en medicina 2001 y doctor Honoris Causa de la Universidad de Salamanca

“Existe una diferencia de 10 ó 15 años entre la investigación que se está realizando en España sobre cáncer y la del Reino Unido”

AVPR/DICYT Ostenta el título de Sir y numerosos premios aunque de todos los que acreditan el extenso curriculum de Paul Nurse hay uno destacado en negrita. La Academia Sueca le concedió, hace tan solo dos años, el premio Nobel de medicina por sus investigaciones sobre los procesos de reproducción celular. Unas investigaciones que han abierto de par en par las puertas al diseño de nuevos tratamientos contra el cáncer.

En esta ocasión no ha sido el Nobel, sino el título de doctor Honoris Causa lo que ha acercado hasta Salamanca a Sir Paul Nurse.

La Universidad suele ser una constante en la vida de la mayoría de investigadores, ya sabemos que no es el Nobel, pero ¿Qué supone para usted el reconocimiento que le brinda una institución académica como la Universidad de Salamanca?

Es un honor estar vinculado a una universidad como la Universidad de Salamanca porque conozco a diferentes personas que trabajan aquí, son buenos amigos y excelentes colaboradores, así que me siento muy honrado.

Uno de sus mayores intereses es la comunicación pública de la Ciencia, ¿Por qué la considera tan importante?

La comunicación entre científicos y sociedad debe conformar uno de los ejes del sistema democrático. A veces los científicos muestran una actitud muy distante a la hora de contar en qué están trabajando en sus laboratorios. En este sentido son un poco snobs y yo creo que esta actitud es errónea.
Los científicos deben acercarse a la sociedad porque sólo así conocerán sus inquietudes y podrán justificar su trabajo.

La divulgación científica tiene diversas variantes, una de las más importantes es el propio sistema educativo, en este sentido ¿cómo percibe usted la actual enseñanza de las ciencias, incluidos los primeros ciclo de la enseñanza primaria y secundaria?

Bien, creo que la enseñanza de las ciencias es sumamente importante, pero que no se está haciendo de la forma adecuada.
Los chicos ven la ciencia como una asignatura dura e incomprensible, lo que a ellos realmente les interesa es curiosear, conocer el porqué de la las cosas y eso no se fomenta.
Lo que se les enseña son fórmulas, leyes, el sistema necesita una reforma.
Y otra carencia es la falta una formación post-educacional.
Una formación que siga respondiendo a las cuestiones de ciencia una vez terminado el periodo de estudios, y que yo creo es la asignatura pendiente de los medios de comunicación. Da igual cómo se haga: mediante información, mediante entretenimiento...

Usted es muy conocido por sus investigaciones acerca del ciclo celular, ¿Podría explicarnos en qué consiste de una forma cercana?

Creo que si puedo (risas), probemos: Todos los organismos vivos estamos formados por células, desde los más pequeños como las levaduras, que son responsables de la fermentación del vino de la cerveza o del pan, hasta los seres humanos. Están en todos al igual que las moléculas forman parte de la materia. Estas células siguen todas lo que hemos llamado el ciclo celular, que es el mecanismo que las permite reproducirse. Las bases del funcionamiento de esta maquinaria se sentaron hace miles de millones de años y han permanecido inmutables desde entonces. Lo que mis colegas y yo hemos investigado son los diferentes pasos del ciclo celular y cómo se regula.

Esta parte de su investigación es la que está más relacionada con la enfermedad del cáncer. Podríamos decir que las células cancerosas no siguen las reglas de este ciclo celular y se reproducen sin control, pero, ¿qué ha aportado su investigación al diseño de nuevos tratamientos contra esta enfermedad?

Bueno, realmente mis investigaciones no han tenido una aplicación práctica inmediata en el diseño de nuevos fármacos porque yo no soy clínico, sino que más bien he contribuido a conocer mejor los mecanismos que se activan en las células al reproducirse y los fallos que se pueden generar en este proceso y que tienen que ver con el Cáncer. Hay dos tipos de investigadores: los que buscan soluciones a problemas concretos, por ejemplo, fármacos y los que investigan para conocer el porqué de las cosas. Yo soy más bien de los últimos.

En muchas ocasiones se ha apuntado que los tratamientos para combatir el cáncer deben ser mucho más específicos. En la actualidad tanto la radioterapia como la quimioterapia no destruyen únicamente células cancerosas sino que afectan también células sanas, y los efectos secundarios son muy duros. ¿Porqué es tan complejo diseñar medicamentos que únicamente afecten a las células cancerosas?

Cuando una célula se reproduce debe copiar su ADN, esta es una de las fases del ciclo celular. Pero este mecanismo de copia no es perfecto, así que pueden producirse fallos. Si uno de estos fallos consigue que la célula se reproduzca de manera incontrolada estaremos ante una célula cancerosa. Bien, en algunos tipos de cáncer las mutaciones genéticas son muy pequeñas. Si tenemos 25 genes solamente 2 ó 3 estarán defectuosos, y la diferencia con una célula sana es casi inapreciable. En otros casos los genes que han mutado son más, entre 7 y 10, pero la diferencia sigue siendo inapreciable.
Como puede ver hay muchos tipos de cáncer y ésta es la gran dificultad.

Estos mecanismos que usted ha descrito están muy relacionados con el cáncer como enfermedad genética, pero ¿dónde quedan los factores ambientales?

Para contestar a esto debo explicar como se produce el Cáncer. Como hemos visto antes uno de los factores es que se produzcan fallos en la copia del ADN durante la reproducción celular. Otra causa es que estos fallos formen parte de tu herencia genética, y una tercera es que algunos factores externos como el tabaco, el sol o la dieta provoquen estos fallos.
Como ve, los factores ambientales son sólo una causa de tres posibles, pero son realmente la única causa que podemos controlar. Claro que esto tampoco es tan fácil porque los factores externos no tienen la misma incidencia sobre todas las personas. Con el tabaco, por ejemplo, es sencillo. Uno fuma o no fuma, pero con la dieta es mucho más complejo. La gente no dice la verdad sobre lo que come y lo que unos consideran saludable otros no. Es complicado incluso para los especialistas describir una dieta equilibrada.

Volviendo a los laboratorios ¿en qué situación ve usted ahora mismo la investigación en cáncer?

Yo creo que los avances son muy importantes. La esperanza de vida para algunos enfermos de cáncer de mama, de cáncer de pulmón o colon es ahora enorme. Nos ha llevado más de 25 años aprender todo lo que sabemos hasta ahora de la enfermedad, por lo que opino que al menos tardaremos otros 15 ó 20 años en tener nuevos tratamientos más eficaces, pero todos los avances son esperanzadores.

¿Cree que el hecho de privatizar la investigación ha afectado por una parte a la financiación y por otra a la publicidad de los resultados?

Es cierto que cuando una empresa privada decide invertir en investigación es muy complicado para los científicos hacer públicos los resultados que obtienen. Las empresas farmacéuticas, invierten mucho dinero y esperan recuperarlo con una patente. Hay que guardar silencio porque los intereses que están en juego son muy grandes. Por otra parte, los investigadores se ven obligados a obtener resultados de forma rápida, aunque esto también ocurre cuando quien financia la investigación es el Gobierno. No sé, creo que ambas son necesarias, la investigación pública debe cubrir las carencias de la privada, aquellas áreas que no despiertan el interés empresarial.

Usted habla extremadamente bien de sus supervisores en la época de estudiante porque le permitieron trabajar con libertad, algo que no encuentra en el sistema de financiación privada de la ciencia. En este punto y si tuviese que elegir con qué se quedaría, con los recursos o con la libertad para decidir en qué investigar?

La libertad es indispensable en todos los ámbitos de la vida, en la investigación y en las ciencias mucho más. Creo que me quedaría con la capacidad de crítica y con el pensamiento libre.

Uno de sus colaboradores ha sido el profesor de la Universidad de Salamanca Sergio Moreno. A través de él conoce las investigaciones que se están desarrollando en esta ciudad, ¿Qué opinión le merecen?

Sí, claro que conozco las investigaciones que se realizan en la Universidad de Salamanca y en Institutos como el Centro de Investigación del Cáncer o el centro para el que trabaja el profesor Moreno, el CSIC. Creo que son muy buenas y con personas muy capacitadas además, los centros están bien equipados, aunque no todos los laboratorios españoles tienen esta suerte.

¿Está muy lejos la investigación que se hace en nuestro país de la que por ejemplo, desarrollan sus colegas en el Imperial Cancer Research Fund de Londres?

Existe una diferencia de 10 ó 15 años entre la investigación que se está realizando en España sobre cáncer y la que se realiza en estos momentos en mi país. España va un poquito por detrás pero los avances son más rápidos y el potencial es bueno.

Esto puede deberse a que ha mejorado la investigación aunando esfuerzos, me refiero a la sinergia de los dos grandes centros de investigación contra el cáncer del Reino Unido, El que usted preside, el Imperial Cancer Research y el Cancer Research Campaign?

Sí, yo estaba interesado en este proyecto, porque de esta forma estaremos ante el segundo mayor instituto de investigación en cáncer después del que existe en Estados Unidos, a menudo la investigación se complementa y así se ahorran esfuerzos y recursos.