Buscan genes de susceptibilidad al desarrollo de cáncer de páncreas
JPA/DICYT “Probablemente, el cáncer de páncreas es el tumor en el que ha habido menos avances en los últimos 50 años”, afirma Francisco Real, investigador del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) de Madrid. Este experto ha visitado hoy el Centro de Investigación del Cáncer (CIC) de Salamanca en busca de nuevas colaboraciones científicas que le ayuden a progresar en la lucha contra una enfermedad que a día de hoy ofrece pocas posibilidades de supervivencia.
El cáncer de páncreas es un tumor es agresivo y los científicos aún no saben cuál es el motivo exacto. “Los genes que están implicados en cáncer de páncreas no son genes únicos que no estén presentes en otros tumores”, comenta el investigador en declaraciones a DiCYT, así que la explicación debe buscarse en otra parte. Por ejemplo, es posible que el tejido en el que se producen esas alteraciones genéticas sea importante y, en ese sentido, “el páncreas es un tejido muy proclive a sufrir inflamación porque las células pancreáticas tienen como función principal producir enzimas digestivos que son altamente lesivos”.
Además, existen otros elementos que podrían explicar la agresividad de este tumor. Uno de ellos es que la mayor parte de los pacientes son mayores y eso dificulta el proporcionar tratamientos eficaces. Otra razón es que muchos de los pacientes llegan en un mal estado general, porque el cáncer de páncreas da lugar a una reacción sistémica que se llama caquexia, que va asociada a pérdida de apetito y de peso, y a las personas que la sufren no se les pueden administrar muchos fármacos. Para colmo, el tumor es resistente al tratamiento. En definitiva, “probablemente, el motivo de que este tumor sea tan agresivo es una combinación de factores diversos”, apunta el especialista.
Ante este panorama, el equipo de Francisco Real busca respuestas. “Dado que es un tumor que progresa muy rápidamente, nos interesa conocer las claves de su desarrollo en fases precoces”, señala. Si los avances en el cáncer de mama y de colon se cimientan en parte en su diagnóstico temprano, en el caso del páncreas es necesario que sea aún más precoz, porque incluso los tumores muy tempranos ya se han diseminado cuando se detectan.
Etapas iniciales
“Estamos intentando comprender esas etapas iniciales”, comenta el investigador, algo imposible de estudiar en humanos porque no se sabe qué personas van a desarrollar la enfermedad. Por eso, “nuestra estrategia en este momento es utilizar el ratón como banco de pruebas” y una de las claves para lograrlo es identificar genes de susceptibilidad, es decir, que puedan dar lugar a la enfermedad.
“En nuestro trabajo la evolución es lenta, pero tenemos algunos hallazgos que indican que algunos genes implicados en la respuesta inflamatoria y en diferenciación celular pueden ser importantes para la susceptibilidad al tumor, no para las fases avanzadas, pero sí para el riesgo de desarrollarlo”, señala el científico del CNIO, que ha impartido un seminario de investigación esta mañana en el CIC para mostrar su trabajo a los expertos de Salamanca.
“El Centro de Investigación del Cáncer es muy conocido”, asegura, “mantenemos una colaboración permanente con varios grupos de aquí, es un centro muy prestigioso”. Por eso, uno de los motivos para visitarlo es hablar con los investigadores para impulsar la cooperación entre las dos partes, según ha explicado.