Health Argentina , Argentina, Tuesday, December 14 of 2010, 13:33

Células madre del ojo tendrían potencial para tratar afecciones de la vista

Estas células con capacidad para auto renovarse proliferan en respuesta al daño celular y podrían ofrecer nuevos tratamientos

INFOUNIVERSIDADES/DICYT Científicos del Instituto Nacional de Investigaciones Bioquímicas de Bahía Blanca (INIBIBB) buscan tratar afecciones de la vista a partir del empleo del potencial de las células madre. Estas células con capacidad para auto renovarse proliferan en respuesta al daño celular y podrían diseñarse tratamientos que utilicen las propias células del paciente afectado. Hasta el momento, han realizado ensayos con roedores, y no descartan que, en un futuro próximo, puedan replicarse exitosamente en seres humanos.


“Una gran variedad de enfermedades retinales afectan a diferentes estructuras del ojo, como la retinitis pigmentosa y la retinopatía del prematuro. Estas enfermedades provocan la muerte de las neuronas fotorreceptoras -las neuronas sensibles a la luz-, lo que lleva a la pérdida de la visión. Hasta el momento, no hay terapias efectivas disponibles para prevenir o revertir estas degeneraciones”, explica la doctora Lorena German, docente de la Universidad Nacional del Sur (UNS) e investigadora del Conicet. 

 

Sin embargo, investigaciones recientes demostraron que en la retina de los mamíferos existe un enorme potencial para la regeneración, donde ciertas células funcionan como “células madre”. Éstas, proliferan en respuesta al daño celular y al tratamiento con factores tróficos (moléculas que permiten la supervivencia de las neuronas), sugiriendo que son capaces de sufrir activación por sí mismas. Así, podrían diseñarse tratamientos que utilicen las propias células del paciente afectado.

 

Una célula madre es aquella que tiene capacidad de auto renovarse mediante divisiones para diferenciarse en distintos tipos celulares. De esta manera se producen células de tejidos funcionales y diferenciados. La mayoría de los tejidos de un individuo adulto posee una población específica propia de células madre, que permiten su renovación periódica o su regeneración cuando se produce algún daño.

 

“En las enfermedades neurodegenerativas, tanto en el ojo como en todo el sistema nervioso, la muerte neuronal se produce de una manera muy característica, denominada apoptosis, un tipo de muerte celular programada que puede llamarse ‘suicidio celular’”, señala el doctor Luis Politi, director del Laboratorio de Neurobiología de la Retina del INIBIBB. La apoptosis puede ocurrir, por ejemplo, cuando una célula se halla dañada y no tiene posibilidades de ser reparada, o cuando deja de ser útil al organismo. La “decisión” de iniciar la apoptosis puede provenir de la célula misma, del tejido circundante o de una reacción proveniente del sistema inmune.

 

“Durante los años que llevan nuestras investigaciones, encontramos determinadas moléculas que tienen actividad antiapoptótica, y consideramos que es un aporte interesante al conocimiento en este campo, ya que en la actualidad las enfermedades neurodegenerativas no tienen cura. Por eso, cualquier contribución que se haga para detener la apoptosis, una de las causas esenciales de las enfermedades neurodegenerativas, puede ser importante”, agrega el investigador.

 

En los últimos años, el equipo de científicos orientó sus esfuerzos a la utilización de agentes antiapoptóticos y células madre para detener la apoptosis y reemplazar las neuronas que murieron. “Lo que buscamos conocer es cómo las células madre pueden participar en la regeneración de neuronas del ojo. En las enfermedades neurodegenerativas del ojo, las terapias utilizadas están dirigidas a evitar que las neuronas mueran por apoptosis. Actualmente, también buscamos las ‘llaves’ que nos permitan reemplazarlas”, cuenta la investigadora.

 

Un tipo de células con las que trabajan son las llamadas “células del margen ciliar”, que es la zona del ojo ubicada en el borde periférico del iris. Las investigaciones se llevan a cabo con células de roedores in vitro e in vivo. Se busca inducir la proliferación controlada de estas células madre y promover su posterior diferenciación hacia un tipo de neurona en especial, para luego poder utilizarlas como reemplazo en la retina dañada, a través de un autotransplante, o en forma endógena, en el caso de los experimentos in vivo.

 

Restauración de retina

 

Según la científica, “existiría un gran potencial para la regeneración si esta flexibilidad del desarrollo pudiese ser manipulada con fines terapéuticos. Por eso, el proyecto propuso inducir el proceso de regeneración, para restaurar una retina funcional, en grados avanzados de afecciones como la retinitis pigmentosa y la retinopatía del prematuro”.

 

“Uno de los aspectos más interesantes del proyecto es que podría realizarse la reparación endógena del tejido afectado en el sujeto, por lo que no se realizaría un transplante, sino que las células madre del mismo individuo serían las que migrarían, se diferenciarían y repararían la zona afectada”, agrega la investigadora, quien aclaró que por ahora se trata de ciencia básica, aunque esperan que sus investigaciones puedan contribuir a desarrollar la base de futuros tratamientos.

 

“El problema de la investigación con células madre es que los científicos aún no tienen muy claro cómo controlarlas; por eso, la fase previa de adquisición de conocimiento sobre la biología de estas células es muy importante. Para aplicarlo en humanos, todavía falta generar más conocimientos y asegurar que no serán células perjudiciales. Cuando eso se logre -y no creo que falte mucho tiempo- será un avance extraordinario”, concluye Politi.