Desvelan el legado genético de los últimos cazadores-recolectores que vivieron en la Península Ibérica
DICYT - Un estudio internacional publicado en la revista ‘Current Biology’ ha aportado nuevos datos sobre el legado genético de los últimos cazadores-recolectores europeos que vivieron en la Península Ibérica. El trabajo, liderado por el Instituto Max Planck (Alemania), sugiere que este es mucho más diverso de lo que se pensaba: es una mezcla de dos tipos antiguos de ascendencia genética, una que se remonta al Último Glacial Máximo y otra que se ha hallado en otras partes del oeste y centro de Europa.
"Podemos confirmar la pervivencia de un linaje paleolítico adicional que se remonta a la última Edad de Hielo en Iberia", afirma Wolfgang Haak, del Instituto Max Planck. "Esto corrobora el papel de la Península Ibérica como refugio durante el último máximo glaciar, no solo para la fauna y la flora, sino también para las poblaciones humanas", agrega.
Estudios anteriores habían señalado que las poblaciones de Europa occidental y central estaban dominadas por una ascendencia asociada a un individuo de aproximadamente 14.000 años hallado en Villabruna (Italia). Esta habría reemplazado en gran medida a una ascendencia anterior, representada por individuos de 19.000 a 15.000 años relacionados con la conocida cultura Magdaleniense.
Pero poco se sabía en torno a la diversidad genética de las poblaciones del sur de Europa a finales del Holoceno. Para tratar de llenar este vacío, Haak y sus colegas, incluidas la estudiante de doctorado Vanessa Villalba –autora principal del estudio- y el equipo de la Universidad de Valladolid, entre otros grupos, aportaron y analizaron muestras de 11 individuos de la Península Ibérica de hace entre 15.000 y 8.000 años.
“El objetivo era estudiar la influencia que la composición genética de esas muestras había tenido en la configuración del legado genético de las poblaciones de la Península Ibérica, tanto cazadoras recolectoras, como el mantenimiento de los genes o ciertos genes a lo largo del Neolítico”, explica a DiCYT el responsable del equipo de la UVa, Manuel Rojo Guerra.
Este equipo cuenta con interesantes muestras de individuos que han hallado en sus excavaciones en los yacimientos de la cueva de Els Trocs (San Feliu de Veri, Huesca) y del Túmulo de la Mina (Alcubillas de las Peñas, Soria), correspondientes al Neolítico Antiguo y Medio.
“A finales del holoceno hay, en la Península Ibérica, una dualidad de influencias genéticas provenientes de poblaciones europeas. Una de ellas relacionada con restos Belgas (Goyet o2) y otras con Villabruna (Italia)”, precisa Rojo Guerra.
El ejemplo más claro de esta doble herencia, añade, se encuentra en un individuo de El Mirón (Cantabria) con una cronología de en torno a 18.000 años. “Esta misma doble ascendencia se ha observado en individuos del Neolítico Antiguo y Medio, apoyando la hipótesis de la pervivencia de estas poblaciones de cazadores recolectores en Iberia desde los inicios del Neolítico, que se llega a mezclar con las nuevas poblaciones que vienen con el nuevo modo de vida productor”, concluye el investigador de la UVa.
"Es fantástico observar los signos de mezcla entre los cazadores-recolectores locales y agricultores recién llegados", continúa Haak. "Simplemente muestra cuánto nos falta aún de saber sobre el pasado".
Los continuos esfuerzos para descifrar la estructura genética de los grupos de cazadores-recolectores tardíos en toda Europa ayudarán a comprender mejor el pasado del continente y, en particular, la asimilación de la forma de vida neolítica promovida por los agricultores en expansión de Oriente Próximo durante el Holoceno. El objetivo de los investigadores es continuar agregando datos genómicos para obtener una explicación lo más detallada posible de cada región y en cada época.
Referencia | |
Villalba-Mouco, V., van de Loosdrecht, M. S., Posth, C., Mora, R., Martínez-Moreno, J., Rojo-Guerra, M., ... & Crevecoeur, I. (2019). Survival of Late Pleistocene Hunter-Gatherer Ancestry in the Iberian Peninsula. Current Biology. |