El Centro Tecnológico de Cereales premia un trabajo sobre un nuevo método detección de maíz transgénico
JPA/DICYT La Fundación Centro Tecnológico de Cereales de Castilla y León (Cetece) ha dado a conocer al ganador del quinto Premio de Investigación Cetece que ha recaído en un trabajo sobre un nuevo método de análisis que permite identificar la presencia de maíz trasgénico Bt en alimentos destinados al consumo animal y humano. Concretamente el proyecto galardonado propone un método más rápido que los protocolos convencionales para identificar esta variedad de maíz a la que se han introducido genes de la bacteria Bacillus Thuringiensis para hacerla más resistente a las plagas de insectos, de manera que sea más sencillo para la industria alimentaria cumplir con la actiual normativa de etiquetado de productos trasgénicos. El proyecto ha sido seleccionado de entre nueve estudios, todos relacionados con los cereales y sus derivados.
El trabajo premiado surgió ante la necesidad que existe de regular los alimentos de consumo humano y animal elaborados a partir de productos genéticamente modificados, lo que ha puesto manos a la obra a los investigadores para reducir los tiempos de los análisis y por tanto evitar el almacenamiento de las diferentes partidas de alimentos. Los métodos convencionales de análisis de ADN son muy costosos y lentos, así que el proyecto premiado propone métodos ultrarrápidos basados en cromatografía líquida, una técnica ampliamente utilizada que permite separar físicamente y cuantificar los distintos componentes de una solución. En concreto, se propone la cromatografía "en fase reversa (RP-HPLC) con columnas de perfusión y monolíticas". De esta manera, la investigación ha permitido poner de manifiesto las diferencias que a nivel de proteínas existen entre las variedades de maíz Bt y aquellas que no han sido modificadas genéticamente.
El jurado estuvo constituido por el presidente del Cetece, quien delegó su voto en un técnico especialista en el campo de cereales y que desarrolla su labor profesional en el Instituto Tecnológico Agrario (ITA), un técnico del Cetece responsable del área de investigación, un representante de la Universidad de Valladolid, perteneciente al área de Ingeniería Agrícola y Forestal de la Escuela de Ingenierías Agrarias del Campus de Palencia, y dos expertos representantes del sector empresarial en el campo de los cereales, uno vinculado al sector harinero y otro al panadero.
Entre los demás trabajos, varios estaban relacionados con la panadería: el estudio de los efectos de las variaciones de presión en el horneado, las condiciones de fermentación en la vida útil de los panes o la influencia de la incorporación de frutos secos en el pan son algunos ejemplos. En el mismo sentido, se presentaron al premio trabajos sobre harinas de castaña y garbanzo o la influencia de los frutos secos en las fórmulas para bizcochos. Otros estudios se desmarcan de este ámbito, como el que analiza las propiedades del gluten de trigo, o el que aborda la caracterización de las variedades de este mismo cereal según su contenido proteico.