Tecnología España , Valladolid, Viernes, 12 de julio de 2013 a las 16:53

El equipo de resonancia magnética más potente de la región se incorpora a la clínica

A las labores de investigación se sumará próximamente la realización de unos 5.000 estudios anuales a pacientes

CGP/DICYT El rector de la Universidad de Valladolid, Marcos Sacristán; el consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado, y el director general de Universidades e I+D+i, Ángel de los Ríos, han presentado hoy el acuerdo por el cual SACYL podrá hacer uso del equipo de resonancia magnética más potente de la región (el Achieva 3T, adquirido en abril por la Universidad de Valladolid para la realización de actividades de investigación) en su labor asistencial. En concreto, se utilizará el equipo tanto para realizar diagnósticos más precisos como para comprobar la evolución de patologías en las áreas de cardiología, neurología o psiquiatría.

 

Según ha señalado el consejero de Sanidad en declaraciones recogidas por DiCYT, se prevé realizar una media de entre 5.000 y 5.400 estudios anuales, es decir, unas 22 resonancias magnéticas al día. “Es la mayor tecnología de resonancia magnética de las que existen en Castilla y León y hemos acordado rentabilizarla y ponerla al servicio de la asistencia sanitaria”, ha indicado. De este modo, la incorporación del equipo de resonancia magnética de la Universidad permitirá reducir listas de espera.

 

La Consejería prevé contratar a unas ocho personas para gestionar el nuevo servicio: dos licenciados sanitarios, dos técnicos especialistas en radiodiagnóstico, dos enfermeras, un celador y un auxiliar administrativo.

 

Asimismo, ha agregado Sáez Aguado, se podrá vincular “asistencia e investigación”. “Queremos impulsar la investigación de carácter trasnacional y por tanto traer parte de la investigación básica a los hospitales para que se traslade lo más rápido posible a la gente”.

 

Tanto el rector de la Universidad de Valladolid como el director general de Universidades e I+D+i han destacado que el coste del equipo ha sido de dos millones de euros, financiados con fondos europeos Feder a través de la Consejería de Educación en un 80 por ciento. De los Ríos ha apuntado que “muchas veces se incorporan a las universidades equipos pero lo más importante es mantenerlos en funcionamiento”, de modo que el convenio suscrito permitirá “aprovechar la inversión inicial”.


Investigaciones abiertas

 

La Resonancia Magnética 3T ya está siendo utilizada por grupos de investigación de la Universidad de Valladolid para el desarrollo de sus proyectos, como el grupo del Laboratorio de Procesado de Imágenes (de la ETS de Ingenieros de Telecomunicación) del profesor Carlos Alberola, así como por los investigadores del Servicio de Radiología del Hospital Clínico Universitario dirigido por la doctora Rosario Esteban, profesora de la UVa, y por investigadores de áreas como la Cardiología (doctor Alberto San Román), Neurología (doctor Juan Francisco Arenillas) y la Psiquiatría (doctor Vicente Molina), todos ellos vinculados a la Universidad de Valladolid.

 

Los trabajos de estos investigadores se centran en utilizar las capacidades de la Resonancia Magnética 3T para obtener imágenes de altísima resolución y poder así monitorizar la actividad cerebral, seguir la difusión de fármacos, o ver la respuesta de diversos órganos, incluido el cerebro, con mucho mayor detalle. Igualmente, se trabaja en la puesta a punto de nuevos procedimientos de tratamiento de imagen, con el fin de obtener un mayor aprovechamiento de la información generada.

 

 

 

Resonancia Magnética 3T

El equipo Achieva 3T una resolución mucho mayor que los equipos de resonancia con los que se cuenta en la actualidad en la región (de 1’5T -Tesla: Unidad de medida de la inducción magnética), lo que permite clarificar estructuras más pequeñas y con mayor detalle. Este aparato está ubicado en las instalaciones del Laboratorio de Técnicas Instrumentales (LTI), dependiente del Vicerrectorado de Investigación y Política Científica, situadas en el Edificio de Ciencias de la Salud (antiguas instalaciones del IOBA).

 

El equipo reduce el tiempo de examen, por la mayor intensidad de campo del sistema. Gracias a su tecnología, la llamada multitransmisión, se pueden obtener imágenes de muy alta resolución espacial en cabeza, corazón, columna, rodilla u hombro, entre otras, y ver las estructuras con más detalle. La mayor intensidad de campo magnético realza el contraste de las estructuras vasculares de manera más notable que los equipos de 1’5T, lo que mejora la precisión en la detección de patologías vasculares y abre nuevas posibilidades en el campo de las neurociencias. Por otro lado, la señal de 3T permite aumentar la capacidad diagnóstica, lo que se traduce en una mejor detección de patologías en fases más tempranas, como por ejemplo en enfermedades neurodegenerativas, o aumentar la precisión en el estadio precoz de los tumores.