Social Sciences Spain , Valladolid, Friday, March 13 of 2009, 16:04

“El LHC debe alcanzar temperaturas 10.000 veces mayores a las del interior del sol para recrear el Big Bang”

Enrico Celeghini, físico italiano, ha explicado hoy en Valladoid los retos del Gran Colisionador de Hadrones

CGP/DICYT La Facultad de Ciencias de la Universidad de Valladolid ha sido escenario hoy de la conferencia El gran colisionador de Ginebra: ¿El final de un paradigma? en la que Enrico Celeghini, profesor de la Universidad de Florencia y colaborador del departamento de Física Teórica, Atómica y Óptica de la institución académica vallisoletana, ha explicado a los asistentes la base del Gran Colisionador de Hadrones LHC, la tecnología “más avanzada del mundo”. Se trata del acelerador de partículas del Centro Europeo de Investigaciones Nucleares (CERN) que el pasado mes de septiembre revolucionó el panorama científico internacional con su intento de recrear las condiciones existentes tras el Big Bang. A juicio del profesor italiano, el LHC debe alcanzar temperaturas "10.000 veces mayores a las del interior del sol" para recrear la situación acaecida en el origen del universo.

 

Pese a una fuga de helio que frustró el primer intento, el experimento, considerado por gran parte de la comunidad científica mundial el más ambicioso de la historia de la Ciencia, está previsto que se repita en un breve plazo. En este sentido, el profesor italiano ha apuntado en declaraciones a DiCYT que el LHC es “la experiencia más vistosa y costosa que se ha realizado nunca a la espera de encontrar el final del paradigma de lo estándar, una construcción científica para describir partículas elementales”.

 

La magnitud del proyecto gestado en Ginebra es tal, que alrededor de 10.000 científicos de más de 500 centros de investigación del mundo participan en él, y ha supuesto dos décadas de trabajo en su diseño y una inversión de más de 4.000 millones de euros. El nuevo acelerador permitirá conocer mejor el origen del universo y su subsiguiente evolución. “Cuando se consiga situar el LHC a temperaturas que son 10.000 veces mayores que las que se encuentran en el interior del sol, temperaturas que se obtuvieron poco después del Big Bang, eso significará que se podrá conocer mejor todo lo que pasó, y es la única manera de hacerlo”, advierte Enrico Celeghini.

 

El bosón de Higgs, en el origen de la masa de las partículas


En concreto, el mayor interés radica en el posible descubrimiento del bosón de Higgs, una partícula elemental hipotética cuya existencia está prevista en el modelo estándar de la física de partículas, pero que hasta el momento no ha sido observada. El bosón de Higgs ayudaría a desentrañar el origen de la masa de las partículas, es decir, a identificar los "ladrillos" esenciales que componen la materia del Universo y, por ende, el propio ser humano. Al respecto, el profesor Enrico Celeghini apunta que el modelo estándar “necesita para avanzar de verdad ser una estructura donde todo funciona. Para ello, en el momento en que se descubra el bosón de Higgs se hará una descripción unitaria de la interacción de las partículas elementales”.

 

El modelo estándar describe las interacciones fundamentales existentes; interacción nuclear fuerte, nuclear débil, electromagnética y gravitatoria, entre las partículas elementales que componen la materia. En esta línea, el objetivo de la Física teórica moderna radica en llegar a describir las cuatro interacciones como aspectos de una única fuerza (interacciones unificadas), por lo que el descubrimiento del bosón de Higgs implicaría un avance sustancial en esta dirección.