Salud España , Salamanca, Miércoles, 29 de octubre de 2008 a las 20:48

"En la primera mitad del siglo XXI veremos gestionar el cáncer como una enfermedad normal"

El científico Joan Massagué, una de las grandes figuras mundiales en la investigación contra el cáncer, ha visitado hoy Salamanca

José Pichel Andrés/DICYT Joan Massagué Solá, una de las grandes figuras mundiales en la investigación contra el cáncer, ha visitado hoy Salamanca para ofrecer una conferencia divulgativa organizada por la Fundación Caja Duero. El director del programa de Biología y Genética del Cáncer del Memorial Sloan-Kettering Cancer Center de Nueva York ha asegurado que los avances científicos van a permitir que en las próximas décadas el cáncer sea percibido como una enfermedad normal, con altas probabilidades de curación.

 

Massagué justifica su presencia en conferencias divulgativas como la de hoy en Salamanca porque "la sociedad es la que reclama, apoya e incita a la inversión en investigación y los científicos tenemos el deber de retornar a la sociedad, en lenguaje normal, el producto de nuestra investigación". En este sentido, "el cáncer era un concepto oscuro y terrible el siglo pasado; en el siglo XXI nos toca entender el proceso, saber que es una enfermedad normal de la cual conocemos mucho y queda mucho por conocer, de la cual se curan muchos y quedan muchos por curar".

 

"En la primera mitad del siglo XXI veremos el logro de gestionar esta enfermedad de forma normal, como se gestionan otras condiciones de nuestro organismo, como los asuntos cardiovasculares, que son graves y mortales en algunos casos, pero ya no los relacionamos con el temor y la confusión que genera el cáncer", comenta. Del mismo modo, el cáncer "es un proceso biológico entendible, manejable y que se puede gestionar". De hecho, el cáncer se ataca "con fármacos normales", aunque "el término quimioterapia tiene connotaciones oscuras porque se trata de medicamentos poco específicos, pero la oncología trabaja para obtener fármacos más específicos".
 

El miedo a la enfermedad se explica principalmente por el origen desconocido de la enfermedad hasta hace pocos decenios. "La intuición decía que se trataba de algo que salía de dentro, el mal interno, una cosa siniestra, no era una infección ni un elemento externo enemigo, sino que el enemigo eran tus propios órganos. Según se avanzó se vio que era así, el tumor desfigura y se esparce, es psicológicamente siniestro", asegura el especialista.

 

Como Lance Armstrong

 

Sin embargo, "sobre la base de lo que conocemos y lo que podemos extrapolar, podemos decir que en las décadas que vienen vamos a tener una capacidad de gestión de la enfermedad que hoy en día consideraríamos fantástica y hace unos años, impensable". Como ejemplo puso el caso del ciclista Lance Armstrong, que superó un cáncer de testículos con metástasis en el cerebro, logró una curación total y ganó siete veces el Tour de Francia. Esto demuestra que es posible no sólo convertir el cáncer en enfermedad crónica, sino en enfermedad curable. Para Massagué, todo es cuestión de tiempo: "ya estamos en el principio del futuro", afirmó.
 

El aspecto más complejo es la metástasis, que provoca el 90% de las muertes, pero "estamos empezando a entenderla, a saber de qué forma se produce, a qué recurren las células de un tumor para poder instalarse en órganos vitales y colonizarlos". Si en España hay 95.000 muertes al año (5.500 en Castilla y León, según apunta el experto), se producen 85.000 por metástasis.

 

El futuro de su investigación

 

Precisamente, entre las investigaciones más relevantes de Massagué está el hallazgo de los cuatro genes que se coordinan en el cáncer de mama para provocar metástasis en el pulmón, estudio que publicó en 2007 y que también ha explicado. "La gran mayoría de las células que salen de un tumor perecen porque se exponen a entornos desfavorables. La que consigue sobrevivir lo hace a base de abusar de múltiples genes normales, aquel trabajo identificó algunos de ellos, pero no explica de qué forma resisten el ataque de un medio que le es hostil, el del tejido pulmonar", reconoce. Por eso, apuntó la línea de investigación futura. "Estamos estudiando de qué otros genes se sirven para ello. Además, hay otros genes que usan para crecer y dominar ese entorno. Esto se puede aplicar a otros órganos y otros tipo de cáncer, por ejemplo, las células de la mama que van a dominar el cerebro echan mano de otros tipos de genes para sobrevivir en un entorno distinto del que tienen en el pulmón. Hay que ir identificando estos procesos, porque de este conocimiento depende la capacidad de poder intervenir farmacológicamente. Las claves que explican un proceso no son válidas para todos y mi grupo no para de abrir el libro en distintas páginas para generar la información sobre la cual otros grupos dedicados a desarrollar medicamentos la conviertan en terapias efectivas", explica.

 

 

El científico habló también de las dificultades que hay en España para investigar, que también se dan en Estados Unidos a pesar de la tradición investigadora tan arraigada de ese país. "Es una cuestión de tener líderes en la administración que entiendan el proceso investigador y tengan el coraje de desarrollar programas que superen legislaturas y tempestades económicas. Los investigadores también deben ajustarse a las realidades del entorno, nunca hay suficiente dinero para hacer todo lo que al investigador se le ocurre, por suerte, porque también tiene ideas peregrinas", subrayó.

 

La filantropía: un salto para la investigación española

 

Sin embargo, Massagué considera que hay una tercera pata, la filantropía, "parca en España". En el caso de su investigación sobre metástasis, iniciada hace seis años, "el Gobierno no habría tragado con un proyecto tan arriesgado, las fundaciones con medios hacen la diferencia y esto en España sería fundamental. Nuestros gobiernos han hecho una labor encomiable y los investigadores han peleado como leones para obtener financiación, pero la filantropía tendría un impacto enorme, porque si está bien aconsejada, va a apoyar proyectos que están a punto de dar el gran salto, para el cual necesitan dinero y tiempo extra que no permite la inevitable burocracia", aseguró.

 

En cualquier caso, "la investigación es una tarea mundial" y España tiene "una excelente reputación por su personal de gran calidad", ya que "el español que se dedica a la Ciencia tiene dotes de investigación, de imaginación y calidad que son muy apreciadas". Massagué llegó a Estados Unidos hace casi tres décadas, pero con las condiciones actuales "seguramente hubiese vuelto", asegura. "Vi lo poco atractivo que era luchar en un sistema en el cual el avance profesional dependía de a quién conocías para ver si avanzabas en unas oposiciones, pero España ha mejorado muchísimo y en algunos sentidos está mejor que otros países europeos". El científico asegura que en un primer momento iba a regresar, pero "no para hacer investigación". Sin embargo, "hoy hay más conocimiento de la carrera científica y las oportunidades en España son magníficas, aunque sigue siendo muy difícil. De hecho, todos los españoles que han pasado por mi laboratorio como posdoctorales han regresado a España", agrega.

 

Currículum
 

Tras doctorarse en Bioquímica por la Universidad de Barcelona en 1978, este científico se trasladó a la Universidad de Brown, en Rhode Island (Estados Unidos), para realizar estudios posdoctorales y ejercer la docencia posteriormente en la Universidad de Massachusetts como profesor de Bioquímica. En 1989 pasó a formar parte del Memorial Sloan-Kettering Cancer Center de Nueva York, lugar en el que se hizo cargo en 2003 del programa de Biología y Genética del Cáncer. Massagué figura entre los 50 científicos más citados en todas las áreas científicas en los últimos 20 años y ha sido galardonado con el Premio Nacional de Investigación Rey Juan Carlos, el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica y los Premios Vilcek y Passano.

 

Sólo el Sol y el tabaco están probados como causas externas 
 

Massagué ha recordado que el término cáncer cobija 200 enfermedades "muy distintas, algunas plenamente curables incluso con metástasis, otras, incurables en la mayoría de los casos". El resto está a medio camino, pero "avanza hacia mayor proporción de tumores que se pueden gestionar o curar gracias a avances en diversos frentes". El experto citó expresamente algunos tipos de cáncer, como el de mama, el testicular, las leucemias infantiles o el cáncer de colon como casos de "batallas ganadas" contra la enfermedad por su alto porcentaje de "control" y hasta "curación", sobre todo gracias al diagnóstico precoz. En la mayoría de los casos incluso se puede suprimir la quimioterapia agresiva y es suficiente con la cirugía y una radioterapia local. 

 

Con respecto a las causas de la enfermedad, al margen del componente genético, para Massagué sólo el sol, en el caso del cáncer de piel, y el tabaco, en el de pulmón, están demostrados científicamente como causas ambientales, ya que la relación de la dieta y el ejercicio no es directa o representa un aspecto difícil de probar científicamente. Por la misma razón descartó que la telefonía móvil o las pequeñas exposiciones a ondas electromagnéticas tengan alguna relación con la enfermedad, aunque sí las exposiciones continuadas a productos contaminantes relacionadas con algunos trabajos.