Alimentación México , México, Martes, 15 de octubre de 2013 a las 10:15

Generan tecnología para conocer los compuestos químicos de los alimentos

La tecnología pesa y estudia moléculas de compuestos, ganó el VI Premio Concyteg 2013

 

AGENCIA ID/DICYT El café es un producto que se consume en todo el mundo. Para conocer sus características, luego de aplicarle diversos procesos -por ejemplo, un tostado de 15 minutos-, se estudian sus compuestos químicos a fin de saber si dicho proceso afecta al grano, su sabor u olor. Esto se realiza con una sonda de plasma, tecnología que desarrolló el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav).


La sonda es una herramienta que sirve para aplicar la técnica de espectrometría de masas, una descarga que se aplica a la flor, fruto u objeto a analizar, en este caso al grano de café después de haber sido tostado por 15 minutos para identificar sus cambios.


La maestra Sandra Martínez Jarquín y el doctor Robert Winkler, del Cinvestav, explican que la técnica de espectrometría de masas sirve para conocer las moléculas que le dan características a un producto como el café. “La sonda funciona a base de plasma de baja temperatura, con ella se le da una descarga al material que va a analizarse para ionizar las moléculas que requieren pesar o identificar”.


Ionizar es poner una carga (positiva o negativa) a una molécula, que generalmente tiene solo carga neutral. Con esta herramienta, al aplicarle flujo de electrones se identifica o pesa la molécula.


Ambos investigadores obtuvieron por este trabajo de investigación el VI Premio Concyteg a la Innovación Tecnológica en la categoría “Innovación tecnológica de investigadores” que se entregó en el Foro Internacional Sistemas de Innovación para la Competitividad 2013, realizado en León, Guanajuato, en septiembre pasado.


“La espectrometría de masas es una técnica que se utiliza en altas élites científicas; lo que hicimos con esta investigación es diseñar una sonda de plasma para aplicar dicha técnica de manera fácil y eficiente, y llevar a cabo detecciones más sencillas que los procesos que hay en el mercado”.


Con esta tecnología analizaron el chile verde para “detectar” dónde se encuentra la capsaicina, sustancia que produce el picor del alimento. Sin necesidad de abrir el producto ya es posible su identificación.


La ventaja sobre otros dispositivos es que la tecnología del Cinvestav trabaja en condiciones ambientales sin preparación de la muestra, lo que requiere muchas veces el uso de solventes y tiempo.


Martínez Jarquín explica que con la sonda de plasma también han identificado bacterias que producen determinados compuestos. “Esta herramienta nos da la oportunidad de ver cuándo y dónde se produce la bacteria, e identificamos si por sus características va a producir algún tipo de antibiótico o qué aplicación podría tener el compuesto”.


El equipo del Cinvestav Unidad Irapuato elaboró la sonda de plasma, que ya está a disposición de especialistas que requieran pesar moléculas o identificar sustancias. Por el momento en el Laboratorio de Análisis Bioquímico Instrumental de este centro hay cuatro proyectos que emplean la tecnología para distintos fines.


Los premiados indican que solicitaron la patente nacional de la parte tecnológica del aparato y próximamente harán lo propio para obtener la internacional. En cuanto a la comercialización, el Cinvestav los vinculó con una empresa a fin de obtener financiamiento para elaborar el prototipo de la sonda de plasma y comercializar el producto.


La sonda de plasma también podría aplicarse en sistemas de control de calidad en la industria porque es un método rápido que no requiere usar solventes o bombas de vacío; reduce costos y tiempo.