Salud Brasil São Paulo, São Paulo, Jueves, 30 de julio de 2020 a las 12:33

Hongos genéticamente similares provocan infecciones graves en distintos hospitales

Especies de Candida presentes en el intestino humano pueden causar infecciones en el torrente sanguíneo de pacientes internados en UTIs. El estudio internacional contó con la Universidad Complutense de Madrid y fue llevado a cabo en 16 nosocomios

AGENCIA FAPESP/DICYT - Un grupo de científicos de Brasil, Italia, España y Dinamarca analizó un total de 884 muestras de hongos del género Candida recolectadas en 16 hospitales y encontró una cantidad significativa de clústeres presentes en más de un hospital. Los clústeres son conjuntos o conglomerados de aislados de hongos que exhiben secuencias de ADN idénticas. Este descubrimiento puede constituir una señal indicadora de la presencia de variedades más virulentas y resistentes a los tratamientos.

 

Este estudio, publicado en Frontiers in Cellular and Infection Microbiology, contó con el apoyo de la FAPESP - Fundación de Apoyo a la Investigación Científica del Estado de São Paulo.

 

Ciertos hongos, como las levaduras del género Candida, forman parte de la biota del intestino humano y no causan ningún problema cuando el organismo está funcionando bien. Pero cuando existe algún desequilibrio provocado por enfermedades crónicas o se concretan internaciones para la realización de diversos procedimientos terapéuticos durante tiempos prolongados, pueden ingresar en el torrente sanguíneo y provocar infecciones graves, y potencialmente mortales.

 

La candidemia, tal como se le denomina a la infección por Candida en el torrente sanguíneo, ocurre fundamentalmente con pacientes internados en unidades de terapia intensiva (UTIs), como así también con pacientes sometidos a trasplantes de órganos y a tratamientos contra algunos tipos de cáncer como la leucemia.

 

“En momentos en que se concretan cuantiosas internaciones de pacientes graves, urge monitorear con mayor atención todavía las posibles fuentes de infección. Tan solo a modo de ejemplo, ahora estamos con una gran cantidad de pacientes críticos con COVID-19, y esta es una complicación con respecto a la cual el sistema de salud debe estar atento. Estos pacientes demandan entre dos y tres semanas de internación en unidades de terapia intensiva, expuestos a antibióticos, medicamentos inmunomoduladores, procedimientos médicos invasivos y hemodiálisis”, dice Arnaldo Lopes Colombo, docente de la Escuela Paulista de Medicina de la Universidad Federal de São Paulo (EPM-Unifesp) y único coautor brasileño del estudio.

 

La mayoría de las infecciones causadas por Candida suceden cuando el hongo supera la barrera del intestino e ingresa en el torrente sanguíneo, en función de complicaciones de enfermedades graves e internaciones hospitalarias prolongadas. Con todo, estas infecciones en parte se deben a la denominada ruptura de la técnica de higiene de las manos de los profesionales de la salud, como así también a ciertos cuidados inadecuados en el manipuleo de los pacientes sometidos a procedimientos médicos invasivos.

 

“Estos factores hacen posible la transmisión horizontal de estos agentes entre distintos pacientes, lo cual explica la presencia de clústeres de infecciones que acometen a individuos internados en un mismo hospital y, con menor frecuencia, en diferentes instituciones”, explica el investigador.

 

Los investigadores analizaron 884 muestras de los 16 hospitales, en las cuales se detectaron 723 genotipos de tres especies: Candida albicans (534 muestras), C. parapsilosis (282) y C. tropicalis (68). El Hospital São Paulo, de la Unifesp, el único representante no solo de Brasil sino también de toda Latinoamérica en el estudio, no mostró grandes diferencias en la frecuencia de formación de clústeres en comparación con los países desarrollados.

 

Todos los hospitales que tomaron parte en el estudio poseen programas que apuntan a evitar infecciones hospitalarias, lo cual en teoría debería llevar a una merma en la cantidad de infecciones cruzadas entre pacientes. Así y todo, se halló un total de 78 aislados (un 11%) conformando clústeres (muestras de un mismo perfil genético infectando a diferentes pacientes). La mayoría (del 45 al 57%) no apareció en más de un hospital al mismo tiempo, pero una pequeña proporción del total de genotipos encontrados (entre 52 al 7,2%) surgió en distintos hospitales, de los cuales 21 ubicados en la misma ciudad y 31 en ciudades distintas.

 

Los estudios realizados

 

Los análisis estuvieron encabezados por Jesús Guinea, en el Instituto de Investigación Sanitaria Gregorio Marañón, de la Universidad Complutense de Madrid, en España.

 

La técnica aplicada para la detección de los hongos fue la de marcadores de microsatélites, con la cual se analizan zonas del ADN que se repiten a lo largo del código genético. Si bien la misma no es tan precisa como la secuenciación total del genoma, permite concretar el análisis de muchas muestras a un costo razonable, con una buena precisión para diferenciar las muestras.

 

En un futuro, los investigadores realizarán el análisis del genoma completo de una parte de las muestras, con el fin de confirmar la semejanza genética dentro de los clústeres y perfeccionar la metodología de marcadores de microsatélites para estudios genéticos de Candida. Asimismo, los científicos estudian qué es lo que hace que las cepas que forman clústeres sean tan virulentas, con la mira puesta en el desarrollo de tratamientos más eficaces.

 

“Estamos observando que las cepas implicadas en episodios de clústeres exhiben una mayor capacidad de producción de biopelículas, una matriz extracelular que les sirve para adherirse a las superficies y protegerse en ambientes inhóspitos, tal como en este caso lo es el sistema inmunológico humano”, dice Colombo.

 

Referencia
Puede leerse el artículo intulado Genotyping Reveals High Clonal Diversity and Widespread Genotypes of Candida Causing Candidemia at Distant Geographical Areas en el siguiente enlace: www.frontiersin.org/articles/10.3389/fcimb.2020.00166/full.