Tecnología España 脕vila, Ávila, Lunes, 26 de mayo de 2008 a las 16:21

La antena de la Agencia Espacial Europea de Cebreros ha participado activamente en las operaciones de la Nave Phoenix en Marte

La antena se ha empleado, sobre todo, durante la fase de aproximaci贸n al Planeta Rojo

MMG /DICYT Después de recorrer 679 millones de kilómetros, la sonda Phoenix se ha posado hoy en una zona del polo norte de Marte, donde iniciará a partir de ahora su misión de recoger muestras de hielo y determinar la existencia de material orgánico.Y en esta misión ha desempeñado un papel clave la antena de 35 metros de que dispone la Agencia Espacial Europea, la ESA, en la localidad abulense de Cebreros, al encargarse de ofrecer soporte para las tareas encomendadas a la Venus Express.

 

La de Cebreros es una de las dos antenas de espacio profundo de la ESA, entidad dedicada a comunicaciones con misiones en órbitas muy distantes o con sondas interplanetarias. Esta antena se ha empleado básicamente durante la fase de aproximación a Marte, así como durante la etapa de entrada, descenso y aterrizaje, para medidas de localización precisa de la nave Phoenix en colaboración con otra antena de espacio profundo de la NASA.

 

Ahora, la sonda Phoenix recogerá muestras del terreno marciano. La existencia de hielo bajo la superficie de las latitudes más altas del planeta fue confirmada a comienzos del 2002 por el orbitador Mars Odyssey, y "Phoenix" iniciará su misión en una región septentrional jamás visitada por un artefacto espacial.
Pero la misión de la sonda no es sólo estudiar el permafrost marciano, porque el objetivo final es determinar si esta región, que abarca casi el 25 por ciento de la superficie del planeta, es habitable.

 

Las muestras que recoja la sonda, que funciona mediante energía procedente de sus paneles solares, serán analizadas por un laboratorio en la cubierta de la Phoenix, para lo que  cuenta con un dispositivo en forma de cuchara formado por tres láminas de metal, que es capaz de recoger hielo tan duro como cemento. Por otra parte, las cámaras de la nave, así como su estación meteorológica proporcionarán información sobre el ambiente. Otro de los objetivos de "Phoenix" es establecer si existieron en esa región condiciones favorables al desarrollo de algún tipo de vida microbiana.

 

La composición y la textura del terreno podrían suministrar alguna pista de si el hielo se diluye como resultado de ciclos térmicos y si las muestras contienen compuestos de carbono, un elemento básico en la formación de vida.