Salud España Valladolid, Valladolid, Miércoles, 03 de marzo de 2004 a las 21:27

“La Ciencia en España está mal. Me quito el sombrero ante los que se quedan aquí pese a todo”

El científico albaceteño Juan Carlos Izpisua Belmonte participó esta tarde en el ciclo Aula Universidad Sociedad

BGA/DICYT Juan Carlos Izpisua Belmonte, director del Laboratorio de Expresión Genética del Instituto Salk de California, estuvo en Valladolid para impartir una charla bajo el título El ADN como herramienta de la revolución biotecnológica, en la que abordó los avances producidos en los últimos 50 años en esta materia y los que se espera que se produzcan en la próxima década.

Izpisua señaló que está participando en los últimos acuerdos firmados con España para la colaboración en materia de Biotecnología, y señaló estar dispuesto a colaborar en lo que fuera necesario. Sin embargo insistió en la idea de que “la Ciencia en España está muy mal” y apuntó que “me quito el sombrero ante los que se quedan aquí pese a todo”. Asimismo alabó la “creatividad y esfuerzo personal” de los científicos españoles que realizan su trabajo y consiguen logros importantes pese a carecer de los recursos necesarios.

En este sentido, apuntó algunos de los logros conseguidos hasta este momento como “la red de transplantes que hay en España que es la envidia del mundo” y señaló el avance que supone la firma del acuerdo con el Instituto Salk, puesto que ha convertido a nuestro país en “el primero con religión católica que abre las puertas a este tipo de investigación”.

Respecto al uso de células madre adultas o embrionarias en la medicina regenerativa, indicó que no son excluyentes, sino “aditivas” y que, a pesar de los avances que se han llevado a cabo en los últimos años “hay que tener cautela”, puesto que aún se conoce muy poco de cómo funcionan las células y cómo se desarrollan y los avances que se publican “juegan con la esperanza de muchos pacientes”.

Desarrollo de extremidades


Juan Carlos Izpisua ha desarrollado importantes trabajos relacionados con los genes que determinan el crecimiento de las extremidades, con la idea de conseguir su regeneración. En este sentido, el científico señaló que las últimas investigaciones señalan que no es un único elemento el que interviene en el desarrollo, sino una combinación concreta de genes y proteinas, lo que viene a confirmar el desconocimiento que aún se tiene sobre el comportamiento de las células madre.

En esta línea, el experto en Biotecnología indicó que “aún estamos muy lejos de conseguir aplicar los conocimientos que tenemos a la ciencia clínica”, y apuntó a la necesidad de conseguir mayor inversión en ciencia básica.