Un hallazgo del Centro del Cáncer abre la puerta al desarrollo de futuras terapias frente al mieloma múltiple
José Pichel Andrés/DICYT Un equipo del Centro de Investigación del Cáncer (CIC), perteneciente al CSIC y a la Universidad de Salamanca, ha publicado un artículo en la revista científica The EMBO Journal en el que revela un nuevo mecanismo molecular implicado en el origen del mieloma múltiple. Al contrario de lo que se pensaba, el inicio y mantenimiento de este tumor dependería de células madre cancerígenas, al igual que cualquier tejido del organismo depende de las células madre. Las implicaciones de este hallazgo son muy importantes, ya que a partir de ahora los científicos pueden intentar diseñar tratamientos que se dirijan específicamente a esas células madre responsables del mantenimiento del tumor.
"Nuestra investigación trata de entender cómo se forma y se mantiene el mieloma múltiple, que sigue siendo incurable", explica Isidro Sánchez García, investigador principal del Grupo de Oncología Experimental y Traslacional del CIC en declaraciones a DiCYT. El equipo que lidera lleva muchos años trabajando para entender cuál es el papel de los oncogenes, los genes que provocan el cáncer, en las células madre tumorales, las que participan en la génesis y mantenimiento de las neoplasias, pero que no parecían estar presentes en el caso del mieloma múltiple.
Hasta ahora se había considerado que este cáncer de la médula ósea estaba formado sólo por células plasmáticas neoplásicas. Sin embargo, estas células que forman parte del sistema inmunitario y secretan anticuerpos ya no tienen capacidad de diferenciarse, proliferar y renovarse para mantener el tumor, como sí lo hacen las células madre. Por eso, los científicos del Centro de Investigación del Cáncer intentaban averiguar "si los oncogenes que participan en la génesis del mieloma múltiple tienen una función todavía no descrita diferente de la que realizan las células plasmáticas".
Ratones
Para llevar a cabo la investigación, el equipo de Isidro Sánchez ha trabajado con modelos de ratón que reproducen una patología similar al mieloma múltiple humano mediante la introducción de los oncogenes en las células madre. "El oncogén dentro de células madre forma células plasmáticas como las que tienen los pacientes, pero al mismo tiempo hay unas células minoritarias no conocidas hasta ahora que son las que mantienen la neoplasia y le confieren la estructura de tejido, porque cualquier tejido tiene unas estructuras que se encargan de renovarlo", señala el experto.
Las repercusiones de esta demostración son muy importantes, no sólo de cara a la detección precoz de la enfermedad, sino también de cara al desarrollo de tratamientos. El hecho de que este cáncer se comporte como otros tejidos implica que contiene "células que no han sido utilizadas como dianas terapéuticas ni en el seguimiento de los pacientes ni en su terapia", de manera que "hay que considerarlas tanto para la prevención y seguimiento de la enfermedad como para el tratamiento", comenta el científico. Es decir, que una terapia eficaz debería eliminar estas células madre del cáncer.
Dianas moleculares
Ahora comienza el reto de encontrar dianas moleculares específicas en esas células, es decir, moléculas que sean susceptibles de ser atacadas por futuros fármacos. "Queremos intentar entender qué sucede en la biología del tumor si eliminamos esas células. Una vez que sepamos si su desaparición tiene alguna influencia, como creemos, o no, el siguiente paso es intentar destruirlas a través de terapias dirigidas", indica Isidro Sánchez. La lógica indica que si juegan un papel en la génesis del tumor, deben jugarlo también en el mantenimiento y que, por lo tanto, su destrucción serviría para combatir la patología con mayor eficacia que en la actualidad.
El equipo de investigación de Isidro Sánchez trabaja en varias líneas. Por una parte, aborda las neoplasias hematopoyéticas que empiezan en las células madre con el objetivo de definir cuál es el papel de los oncogenes. Asimismo, analiza las neoplasias hematológicas que cuyo origen hasta el momento no parece estar relacionado con las células madre. Finalmente, otra línea investiga los tumores sólidos como el cáncer de pulmón o el de mama también a partir de la hipótesis de que las células madre puedan tener un papel importante.
El artículo de The EMBO Journal, una de las revistas científicas más prestigiosas del campo de la Biología molecular, aparece firmado en primer lugar por la investigadora Carolina Vicente Dueñas, que forma parte del grupo de Isidro Sánchez, acompañada por otros investigadores de la Universidad de Salamanca y de centros de investigación de Madrid.