Nutrition Colombia , Bogotá D.C., Friday, November 28 of 2008, 17:50

Una investigación que busca un biocombustible alternativo recibe el Premio Mariano Ospina Pérez

El galardonado, Alejandro Amadeus Castro Vega, es ingeniero químico de la Universidad Nacional de Colombia y estudia las características fisicoquímicas de la biomasa

UNIMEDIOS/DICYT Es un hecho: el petróleo tarde o temprano se acabará. Esta es una de las grandes preocupaciones del mundo. Los biocombustibles tradicionales también generan resquemores, pues para muchos está en juego la seguridad alimentaria. Por eso, la investigación de Alejandro Amadeus Castro Vega genera esperanza. Su propuesta, en la que trabaja desde hace cinco años, es crear un sustituto para el combustible líquido y los aditivos químicos a partir de los desechos orgánicos, aquellos que van a dar a los rellenos sanitarios. Es por esta idea que se ganó el Premio Mariano Ospina Pérez 2007-2008 Biocombustibles. 
 

Castro Vega es ingeniero químico de la Universidad Nacional de Colombia. En el 2003 empezó la investigación de la conversión hidrotérmica de biomasa y residuos de biomasa para la producción de combustibles líquidos con características fisicoquímicas semejantes al crudo de petróleo. El ahora estudiante de posgrado explica que es necesario explorar todas las fuentes de biocombustibles posibles, y los desechos orgánicos son una buena fuente de energía poco estudiada hoy en día. Pocos países en el mundo investigan esta posibilidad. En Colombia, Castro Vega y su asesor, el profesor Jesús Díaz, son los pioneros en el tema.

 

"Tenemos buenos avances en el sentido de que estamos utilizando materiales residuales, que no compiten con la seguridad alimentaria, que son de alto rendimiento. Haciendo un balance global, podemos considerar que se recupera más energía que haciendo etanol o biodiesel. En la actualidad hay un inconveniente y es que este material es un aceite oscuro, muy reactivo y a veces se endurece. Entonces estamos en el estudio de su estabilización, de conocer su naturaleza química, qué hay dentro, qué está ocurriendo al interior de ese crudo, para que luego pueda ser utilizado eficientemente en un motor de combustión", dice el ingeniero químico.

 

Futura planta piloto

 

Alejandro Amadeus espera que su idea obtenga mayor respaldo. En la actualidad, la experimentación la realiza en un pequeño reactor en el Laboratorio de Combustibles del Departamento de Química, pero su deseo es que se construya una planta piloto donde se podrían hacer estudios a mayor escala.

 

"He buscado respaldo por fuera de la Universidad Nacional, pero no he tenido éxito todavía. La industria todavía está muy atraída por el etanol y el biodiésel. Sin embargo, hemos tenido apoyo de gente particular interesada, que ha visto los resultados y gracias a ellos fue que conseguimos ciertos materiales de alto rendimiento para la investigación", asegura Castro.

 

El Premio Mariano Ospina Pérez 2007-2008 se entrega a las iniciativas de investigación que estén buscando nuevas alternativas de biocumbustibles. En esta ocasión también se le hizo un reconocimiento al docente Jesús Díaz, Director del Laboratorio de Combustibles, por el apoyo y asesoría permanente al trabajo que desarrolla Alejandro Amadeus Castro Vega.