Un proyecto europeo analiza las bases genéticas de las reacciones adversas graves a medicamentos
Cristina G. Pedraz/DICYT Las reacciones adversas a medicamentos (RAM) son cada vez más importantes como causas de mortalidad entre la población. Según los expertos, la susceptibilidad individual a estas reacciones graves está influida por las diferencias determinadas genéticamene a la hora de llevar a cabo la absorción, la disposición, el metabolismo o la eliminación de los fármacos. Con el objetivo de identificar las variantes genéticas que predisponen a las RAM, científicos de ocho países europeos y de Canadá han puesto en marcha el proyecto Eudragene, cuyo coordinador a nivel español es Alfonso Carvajal García-Pando, director del Instituto de Farmacoepidemiología (IFE) de la Universidad de Valladolid.
Tal y como ha explicado en declaraciones a DiCYT, los medicamentos cuentan con un problema, “hay gente que responde bien y otros que no responden y que desarrollan complicaciones”, algo que a priori “no puede conocerse”. No obstante, esta susceptibilidad puede estar condicionada “de forma genética” por lo que la investigación está avanzando en el campo de la farmacogenética. El proyecto Eudragene se enmarca en esta línea y tiene como objeto específico crear una colección de casos y controles que sea compartida libremente, así como la disposición de muestras de ADN como recurso para estudiar factores genéticos predictivos.
De esta forma, se paliaría la problemática que está encontrando la investigación sobre la base genética de la susceptibilidad a las RAM, la falta de un recurso adecuado de casos y controles. Esto se debe a que ningún país europeo aislado puede generar un número suficiente de casos (mayor a 200) de estas RAM graves, muy poco comunes, para elaborar estudios en un tiempo razonable. Por ello, se necesita la colaboración europea que permita que la población de captación ascienda a 250 millones de personas y obtener un número grande de casos en un tiempo reducido.
En un primer momento, se analizará un conjunto de RAM que constituyen un problema sanitario importante al producir enfermedades graves, discapacidad o muerte en personas expuestas a fármacos. Se trata de seis reacciones adversas que se identifican fácilmente porque tienen unas manifestaciones características que no están relacionadas con la enfermedad para la que se prescribió el fármaco, como la miopatía (degeneración progresiva de las fibras musculares) producida por estatininas (medicamento más utilizado para reducir el colesterol).
Plan de recogida
Todos los países de la Unión Europea cuentan con un sistema de notificación espontánea de sospecha ante reacciones adversas. Aunque en la actualidad la farmacovigilancia es responsabilidad de las agencias nacionales de medicamentos, los sistemas estatales se están armonizando por medio de la Agencia Europea de Evaluación de Medicamentos, que ha constituido un grupo de trabajo de farmacovigilancia y está poniendo en marcha una mase de datos de notificación Ram en el ámbito europeo.
El plan de recogida de datos incluye, primero, la identificación de los pacientes que han sufrido las RAM objeto de estudio, que se realizará en los centros autonómicos de farmacovigilancia. En caso de respuesta afirmativa, el organismo regional facilitará los datos para la identificación de los pacientes y se pondrá en contacto con el coordinador español del proyecto, Alfonso Carvajal, quien enviará a los médicos colaboradores los formularios del estudio y el material necesario para la toma de muestras de sangre. Las muestras de los pacientes que acepten la colaboración se mandarán al Laboratorio Vaecgene de Munich (Alemania), el centro de análisis del proyecto.
Allí los investigadores analizarán los polimorfismos relacionados con los genes de la respuesta inmune en el transporte de fármacos (HLA, interleukinas) y en genes relacionados con su metabolismo (polimorfismo del CYP2D6) en los que existe información de su relación con toxicidad por fármacos.
El proyecto, financiado por la Comisión Europea y coordinado por Paul McKeigue, de la Unidad de Epidemiología de la London School of Hygiene and Tropical Medicine (LSHTM), ofrecerá información para la individualización del tratamiento, la elección de medicamentos, el ajuste de las dosis, la reducción de la toxicidad y la minimización de interacciones.