Salud España , León, Lunes, 10 de septiembre de 2012 a las 17:13

Los expertos detectan que el 21% de los pacientes con dolor cr贸nico sufre depresi贸n

El doctor Juan Carlos S谩nchez, de la Unidad del Dolor de la Cl铆nica San Francisco de Le贸n, se帽ala que se habla de dolor cr贸nico cuando 茅ste tiene una evoluci贸n superior a los dos o tres meses

CGP/DICYT Según las estadísticas presentadas en el Congreso Mundial del Dolor celebrado recientemente en Italia, el 21 por ciento de los pacientes con dolor crónico ven alterado su estado emocional, lo que les llega a provocar depresión. Este dato pone una vez más de relieve la importancia de tratar el dolor crónico, ya que tiene un gran efecto negativo en la calidad de vida de los pacientes. Por este motivo, son de gran utilidad las unidades del dolor, que están compuestas por especialistas en este campo y que ofrecen un tratamiento personalizado y adaptado a cada caso.

 

El doctor Juan Carlos Sánchez, integrante de la Unidad del Dolor de la Clínica San Francisco, apunta que el perfil del paciente de este tipo de unidades “es una persona que tras haber acudido al médico del área correspondiente y haberse sometido a diversos tratamientos no ha podido aún eliminar ese dolor, momento en el cual lo recomendable es que acuda a una Unidad de Dolor donde sus profesionales le aplicarán el tratamiento más adecuado a su situación y cuyo objetivo final es acabar con ese dolor crónico”.

 

Los estudios presentados en Italia también indican que la mayoría de los pacientes son mujeres de entre 40 y 50 años y que un gran porcentaje de los casos tienen su origen en el dolor de cabeza y de espalda. Además, otro dato preocupante es que en el 20% de los casos esta dolencia provoca la pérdida del trabajo o modifica considerablemente la vida profesional del afectado.

 

En cuanto a como identificar el dolor crónico, el especialista de la Unidad del Dolor de la Clínica San Francisco indica que se habla de dolor crónico cuando éste tiene una evolución superior a los dos o tres meses.

 

En comparación con otros países europeos, España tiene una posición privilegiada ya que según los datos presentados en dicho congreso sólo el 12 por ciento de la población padece dolor crónico, lo que la sitúa junto al Reino Unido e Irlanda como los países europeos con menor prevalencia de esta dolencia. En la situación contraria se encuentran Noruega, Polonia e Italia, con un 30 por ciento, 27 por ciento y 26 por ciento respectivamente.