Desarrollan prótesis más livianas y compatibles con una mezcla de polímeros e hidroxiapatita
UN/DICYT Una mezcla de polímeros y hidroxiapatita, adelantada por investigadores de la UN en Manizales, hará a los implantes o prótesis más biocompatibles y livianas. En el campo de la medicina, para crear implantes dentales o de tipo ortopédico es recurrente el uso de metales. Sin embargo, a pesar de ser elementos muy estables a largo plazo, estas piezas pueden producir problemas para la salud, ya sea por el desgaste producido por el movimiento, ya sea por corrosión o liberación de iones metálicos.
En la búsqueda de incrementar la biocompatibilidad de estos elementos, en el Laboratorio de Física del Plasma de la UN en Manizales, se trabaja en la obtención de polímeros dopados (mezclados) con cristales de hidroxiapatita (HA), componente reconocido por sus cualidades para integrarse a nivel óseo.
El Grupo de Investigación en Biomateriales explora nuevas posibilidades. La HA puede obtenerse de manera sintética, pero a costos muy elevados, o extraerse de elementos orgánicos, en este caso de los huesos del cerdo.
Para producir el material, en el laboratorio se les adiciona HA a los polímeros, para formar una matriz de cristales dentro de su estructura porosa. Esta, una vez implantada en el cuerpo, proporciona una adherencia tal que puede llegar a ser parte del hueso mismo.
Este procedimiento da grandes beneficios, porque los metales son muy densos y, en el momento de implantar una platina o un relleno óseo, su peso causa tensión en el cuerpo, mientras que el polímero es muy liviano.
“Por ejemplo, un tornillo elaborado de polímero con HA se podría integrar de forma eficiente al hueso y evitaría así que, posteriormente, se presente un rechazo o aflojamiento y haya que retirarlo para poner uno más grande”, indica Juan Camilo Orozco Cardona, estudiante de Ingeniería Física.
Y agrega: “Otra de la ventajas es que nos permite empezar a manipular la HA de modo que no solo sea un polvo, sino que se le pueda dar otras presentaciones, para aprovecharla más ampliamente según las necesidades de un médico o un veterinario”.
El trabajo se desarrolla en alianza con la Universidad Autónoma de Manizales, para las pruebas de hemocompatibilidad. Y con la Universidad Federal de Río de Janeiro se llevarán a cabo los procesos de biocompatibilidad.