Technology Spain , Valladolid, Tuesday, July 09 of 2013, 17:36

Investigan alternativas para reciclar arenas procedentes de la industria de la fundición

El Grupo de Tecnología de Construcción con Tierra de la Universidad de Valladolid ha obtenido el segundo premio del concurso ‘Desafío Universidad-Empresa’

Cristina G. Pedraz/DICYT El Grupo de Tecnología de Construcción con Tierra de la Universidad de Valladolid ha obtenido recientemente el segundo premio del concurso Desafío Universidad-Empresa por un proyecto que trata de dar respuesta al reciclaje de arenas procedentes de la industria de la fundición. El certamen, enmarcado en la Estrategia Universidad-Empresa de Castilla y León 2008-2013 con el patrocinio de la División Global Santander Universidades, propone una serie de demandas tecnológicas por parte de empresas y son los investigadores de las ocho universidades de la región quienes aportan posibles soluciones.

 

En este caso una industria del área de la fundición, en concreto de la fundición en PEP SET, planteó como objetivo encontrar una aplicación a la tonelada aproximada de arenas residuales que genera diariamente este proceso industrial. Como explica a DiCYT Félix Jové Sandoval, coordinador del Grupo de Tecnología de Construcción con Tierra, tradicionalmente se han dado tres usos a estos residuos, aprovechamientos “que suponen nuevos costes económicos y medio ambientales para la empresa”.

 

En primer lugar, estas arenas se utilizan habitualmente en el ámbito de las infraestructuras, por ejemplo para el relleno de firmes en obras de carretera, “lo que supone que el residuo tenga que desplazarse y por tanto costes de traslado y emisiones de CO2 a la atmósfera”. Además se emplean en la fabricación de cemento, “para lo que vale cualquier otro material por lo que consideramos que supone una pérdida de valor del residuo”. Finalmente, estas arenas residuales se han aplicado a la fabricación de materiales cerámicos, “lo que también implica una pérdida de valor del material y un importante coste económico relacionado con los procesos de cocción”.

 

“Nuestra idea es buscar una alternativa a los actuales usos que se le está dando a este material, encontrar sus puntos fuertes y destinarlo como materia prima a la producción de otros materiales que no incorporen consumo de energía y por tanto más emisiones de CO2 a la atmósfera, para completar un ciclo medioambientalmente controlado”, avanza Jové. Se trata, pues, “de convertir el residuo en un recurso”.

 

Para ello, realizarán un estudio sobre la idoneidad técnica, medioambiental y económica de estas arenas. “Estos residuos tienen una característica importante y es que en algunos casos están estabilizados. Es un material que tradicionalmente se está utilizando, como hemos señalado, para unos usos que le hacen perder parte del valor añadido que ya tienen como resultado de haber estado sometido a un proceso de altas temperaturas. Consideramos que podría ser una arena altamente cualificada, de tal modo que podría ser idónea como materia prima para producir otro material que se pueda aplicar en procesos de construcción”, detalla.


‘Desafío Universidad-Empresa 2013’


El concurso Desafío Universidad-Empresa 2013 está promovido por la Consejería de Educación, a través de la Fundación Universidades y Enseñanzas Superiores de Castilla y León (Fuescyl), con la colaboración de la Consejería de Economía y Empleo, a través de la Agencia de Innovación, Financiación e Internacionalización Empresarial (ADE). La primera edición ha contado con la participación de todas las universidades de Castilla y León con el objetivo de fomentar la realización de proyectos de I+D+i en colaboración con las empresas de su entorno, a partir de necesidades científico-tecnológicas concretas identificadas, previa y directamente, desde el propio sector empresarial.


En concreto, los investigadores de las ocho universidades de Castilla y León han presentado más de 50 propuestas de colaboración como respuesta a las 37 demandas tecnológicas concretas, previamente planteadas por las 33 empresas participantes en el concurso.
 

Las tres propuestas ganadoras recibirán, además del correspondiente diploma acreditativo, premios en metálico de entre 8.000 y 12.000 euros, destinados a financiar la participación universitaria en el proyecto de I+D+i resultante. Los galardonados recibirán los premios en un acto público organizado por la consejería de Educación que se celebrará mañana miércoles, 10 de julio.
 

El concurso forma parte del Proyecto de Transferencia de Conocimiento-Universidad Empresa (Proyecto T-CUE) coordinado por la Fuescyl. El objetivo principal es fomentar la generación de ideas empresariales en el entorno universitario y materializarlas en nuevas empresas para transformar el conocimiento teórico de las aulas en proyectos reales que favorecen el desarrollo económico de la comunidad.