Un estudio define cómo cuidar aves y mitigar sustancias contaminantes
AGENCIA ID/DICYT En la Huasteca Potosina, habitan cerca de 400 especies de aves migratorias y residentes, es decir, las originarias de esta región; además de 15 variedades de murciélagos. Con el fin de mantener su hábitat, especialistas del Instituto Potosino de Investigación Científica y Tecnológica (IPICYT) realizaron un estudio en tres tipos de bosque – selva baja, mediana y bosque secundario- y el resultado es que estos animales se han conservado debido a la abundante vegetación de la zona.
Para continuar con la preservación de aves y murciélagos en el lugar, se realizó un acuerdo con ejidatarios para proteger 20.000 hectáreas de sembradíos por periodos de 20 años, a cambio de asesoría para incorporarse a programas de compensación por captura de carbono, los cuales buscan mitigar la emisión de sustancias contaminantes al medio ambiente.
Leonardo Chapa-Vargas, investigador de la División de Ciencias Ambientales del IPICYT y responsable del proyecto titulado “Conservación de Hábitat para aves residentes, migratorias y murciélagos en la Huasteca Potosina”, explicó que además se documentaron semillas encontradas en las heces fecales de estos mamíferos.
“Los murciélagos, en la región potosina, se trasladan hasta 10 kilómetros en una noche, por lo que llevan a cabo la dispersión de semillas, lo que permite regenerar la vegetación. Su ecosistema se ha conservado debido a la flora abundante. Prevemos que estas acciones conjuntas con la población continúen como una tarea permanente a fin de mantener esas especies”.
Por su parte, las aves migratorias también permiten varios servicios ambientales como el control de población de insectos y mamíferos de los que se alimentan, dispersión de semillas y la polinización, es decir el proceso reproductivo de las plantas.
De manera posterior, los académicos pretenden monitorear en los próximos años el hábitat de estas especies, y eventualmente darán a conocer los resultados para generar consciencia social para su conservación.
El análisis, realizado en colaboración con instituciones del gobierno de México, de Estados Unidos y Organizaciones No Gubernamentales; consistió en estudiar la estructura de las comunidades de aves migratorias, residentes y murciélagos para generar soluciones integrales a problemas que afectan estos ecosistemas.