Queserías de Zamora automatiza el proceso de fabricación de sus quesos
SG/DICYT La expansión en la producción y la necesidad de hacer frente a una demanda creciente ha llevado a Queserías de Zamora a automatizar la totalidad del proceso de fabricación de sus quesos, y por este motivo, desde hace meses, un equipo de ingenieros trabaja en la instalación de una moderna cámara de conservación y secado de los quesos que estará lista antes del verano. Una de las novedades más importantes que incorporará la empresa zamorana es la sustitución de las cubetas de plástico en las que los quesos se someten al proceso de curación por las tradicionales baldas de madera.
La nueva cámara de conservación y secado permite perfeccionar el proceso de elaboración y el control sobre la calidad del producto. Después de agregarle la salmuera, el queso pasa por un proceso de maduración que se prolonga durante aproximadamente un mes en la cámara del mismo nombre, a una temperatura de entre 8 y 10 grados centígrados. A continuación, es introducido en la cámara de secado, donde permanece un año a una temperatura de 2 a 3 grados, periodo en el que es necesario dar vueltas al queso para que se seque por ambos lados, utilizando para ello un sistema de palas. En el sistema empleado hasta ahora por la factoría zamorana los quesos permanecían en cubetas de plástico durante su secado, pero con la nueva tecnología reposarán sobre las clásicas baldas de madera utilizadas por las industrias queseras tradicionales. El nuevo sistema automatizado también permitirá que el volteo de los quesos se haga cada seis días de manera mecánica, sin necesidad de que un trabajador realice la operación.
La nueva cámara sustituirá al sistema utilizado hasta la fecha, integrado por cubetas de plástico con capacidad para seis quesos. En su lugar recupera la balda de madera, lo que en opinión de los responsables de la empresa permitirá disminuir el número de averías o desperfectos en el producto final. Las baldas de madera se vienen utilizando en países como Italia en la elaboración del afamado queso parmesano.
Queserías de Zamora (conocida empresarialmente por la denominación de Marcos Conde) está experimentando una expansión comercial que se traduce en un incremento del 10% anual de las ventas, con una proyección exterior en constante crecimiento. Las exportaciones se centran, fundamentalmente, en Portugal, Andorra y Estados Unidos. El año pasado la empresa recibió el premio Cecale de Oro.