Health Nicaragua , Nicaragua, Tuesday, October 20 of 2009, 16:34

Analizan la efectividad de una vacuna antidiarreica

Debido a las condiciones sanitarias de los países en desarrollo las vacunas contra rotavirus podrían no dar el mismo resultado que en los países desarrollados

EA/DICYT Sylvia Becker-Dreps, profesora asistente de medicina familiar en la Escuela de Medicina de la Universidad de Carolina del Norte (Estados Unidos), ha recibido un subsidio de 507,000 dólares (338,582 euros) para iniciar inmediatamente un estudio en Nicaragua sobre la efectividad de una vacuna contra los rotavirus que causan diarreas mortales en niños menores de cinco años. El subsidio ha sido otorgado por el Centro Internacional Fogarty, afiliado a los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos, y está estipulado para que dure los próximos cuatro años.

 

Los rotavirus son la causa más común de vómitos y diarrea entre la población infantil, y se calcula que producen la muerte de 527,000 niños al año en todo el mundo. En Nicaragua, la diarrea es la principal causa de muerte de niños cuya edad oscila entre los primeros meses de vida y los cinco años. En el 2006, el país centroamericano puso en marcha un proceso de inmunización mediante el uso de una vacuna oral que los niños toman en tres periodos: a los dos, a los cuatro y a los seis meses de vida.

 

Si bien la vacuna contra rotavirus ha sido aplicada con éxito en Estados Unidos y Europa, poco se sabe sobre los resultados que está teniendo en países del mundo en desarrollo. Becker-Dreps explicó a DiCYT que existen varios factores relacionados con las condiciones sanitarias de estos países y los recursos disponibles, que podrían estar interfiriendo en su efectividad.

 

De acuerdo con la investigadora, países en vías de desarrollo como Nicaragua a menudo utilizan la vacuna oral contra la poliomielitis con el virus atenuado, en comparación con la vacuna inyectable con el virus inactivado que se usa en los país industrializados. Se ha demostrado que la vacuna oral de la poliomielitis reduce ligeramente la efectividad de la vacuna contra los rotavirus, cuya aplicación también es oral.

 

"Además", continúa Becker-Dreps, "la lactancia puede interferir con la vacuna oral contra los rotavirus, mientras que otros factores como niveles altos de malnutrición e infecciones intestinales podrían reducir su efectividad. Por último, la falta de electricidad podría provocar una inadecuada refrigeración de la vacuna".

 

El estudio de Becker-Dreps busca comprobar la efectividad de la vacuna tanto en el sector de atención primaria del sistema de salud nicaragüense, para lo cual cuentan con el apoyo de las autoridades locales, como en el marco sanitario de las comunidades. Además, los investigadores realizarán pruebas genéticas en las muestras del estudio que resulten positivas con rotavirus, con el propósito de determinar si los cambios en las cepas del virus están ocurriendo como consecuencia del programa de inmunización.


Aunque el nuevo estudio empezará ahora impulsado por la subvención económica recién obtenida, Becker-Dreps ha estado en Nicaragua durante dos años realizando investigaciones previas, con el fin de sentar las bases de una proyecto cuyos resultados podrían tener una aplicación regional.

 

"Nicaragua fue uno de los primeros países del mundo en desarrollo en iniciar la inmunización universal de sus niños contra rotavirus. Por lo tanto, las lecciones aprendidas aquí podrían ser importantes para otros países en vías de desarrollo", señaló la investigadora.